El intento de robo a una joyería en el centro, en el que el ladrón mantuvo como rehén a la dueña del local durante siete horas, se convirtió en la noticia policial de la semana.
El hombre, al notar la presencia de la policía, tomó de rehén a la mujer de 73 años, dueña del negocio.
Cuando la Policía logró establecer contacto con el delincuente, el ladrón explicó había perpetrado el robo por un "problema que tuvo un familiar de él, concretamente su hijo".
El hombre tiene 42 años y cuenta con tres antecedentes penales, uno de ellos por violencia privada. Será conducido a declarar hoy a la Fiscalía, que lo formalizará por rapiña y privación de libertad.
El intento de robo a la joyería, cubierto ampliamente por los medios, no fue la primera aparición mediática de este individuo.
Un informe de El Observador revela que este hombre es el mismo que en 2018 se encadenó frente al Juzgado de Familia para reclamar por la tenencia de sus hijos, un episodio que fue también cubierto por Montevideo Portal.
Junto a otros dos hombres, el ahora detenido reclamó poder ver a sus hijos e inició una huelga de hambre en el Juzgado ubicado en Rondeau y Valparaíso. En aquel momento denunció "violación de derechos humanos y discriminación de la Justicia".
Dijo que la Justicia no lo dejaba ver a sus hijos porque su expareja lo denunció por violencia doméstica, algo que calificó como "falso".
El 23 de octubre, la página Stop Abuso Uruguay publicó una foto en la que se ve al hombre a la salida del juzgado, luego de tener una audiencia, mientras es tomado por el cuello por su expareja.
"Una compañera de Nicolás que había ido a buscarlo con su pareja sacó la foto cuando esta señora lo estaba agrediendo físicamente", denunció la página.
Al encadenarse frente al Juzgado, contó a la prensa que tenía tres hijos (de nueve, siete y dos años por entonces). "Si tienen corazón que me den la fecha de la audiencia del juicio. Eso es lo único que pido", dijo a Telemundo 12.
El hombre, que había denunciado que la madre de sus hijos era consumidora de pasta base, logró luego que le dieran la tenencia de sus hijos. Vivía con ellos -según El País, uno tiene discapacidades y necesita medicación-, su actual pareja, dos hijos de esta mujer y un bebé que tuvieron ambos hace pocos meses.
Según informó El Observador, el hombre decidió entregarse a la policía tras hablar con su pareja y con un abogado de su confianza, que le insistieron que con su actitud iba a perder la tenencia de sus hijos. Salió acompañado del abogado, que representa al colectivo Familias Unidas por Nuestros Hijos, del que el hombre es parte.