El presidente electo, Luis Lacalle Pou, anunció este lunes que Uruguay se retirará del Mecanismo de Montevideo y también evaluará irse del Grupo Internacional de Contacto, sendas iniciativas de diálogo en búsqueda de paz para Venezuela.
"A priori el mecanismo de Montevideo no lo vamos a seguir integrando. Nosotros tenemos una concepción general que después obviamente deja de ser general y va a lo particular sobre la superabundancia de estrados internacionales", manifestó Lacalle Pou.
Uruguay es, precisamente, el país que impulsó el Mecanismo de Montevideo en conjunto con México y el Grupo de Contacto con la Unión Europea, y está dentro de ambos desde su creación.
Días atrás, el Mecanismo de Montevideo sumó a sus reuniones a un representante del electo gobierno argentino, que se sumará al grupo luego de la asunción de Alberto Fernández.
Montevideo Portal consultó al senador frenteamplista Rubén Martínez Huelmo, del Movimiento de Participación Popular (MPP), quien discrepó con el anuncio de Lacalle Pou.
Huelmo consideró que el Mecanismo de Montevideo y el Grupo de Contacto "han sido exitosos porque evitaron la intervención", en referencia a la intervención militar extranjera.
"El Grupo de Contacto tiende a cumplir lo que dice la Constitución de la República en cuanto a política internacional: abonar la solución pacífica de la controversia, el fomento de políticas humanitarias y el fomento del diálogo entre las partes", expresó el legislador.
Sin embargo, más allá de la desazón por abandonar el Mecanismo de Montevideo, Huelmo consideró "interesante" que Lacalle Pou "no ha dicho que abandonaríamos el Grupo de Contacto con la Unión Europea".
"Lo peor que podría hacer el gobierno entrante sería afiliarse 100 % al Grupo de Lima", afirmó en referencia al conjunto de países integrado por Brasil, Chile, Colombia, Paraguay y Perú, entre otros, que en su mayoría reconocen a Juan Guaidó como presidente legítimo de Venezuela.
"Creo que el gobierno de Uruguay hizo una muy buena cosa diferenciándose del Grupo de Lima y de la Secretaría General de la OEA, que bregaban por el reconocimiento de un presidente que no había sido electo y sí había sido elegido por el presidente de los Estados Unidos, como es Juan Guaidó", expresó Huelmo.
A su vez, Huelmo criticó la postura de algunos opositores a estas organizaciones, quienes consideraron que Uruguay estaba determinando su accionar con Venezuela por afinidades ideológicas.
"Uruguay no hizo esto por afinidad ideológica, sino que lo hizo fiel a sus antiguos principios de política internacional. Uruguay actuó con la afición que puede tener un gobierno de nuestro país con cualquier otro gobierno latinoamericano", dijo Huelmo y recordó que el gobierno uruguayo también sancionó a Venezuela con cláusulas democráticas en el Mercosur.
Por otro lado, Montevideo Portal consultó al diputado y secretario general del Partido Socialista, Gonzalo Civila, quien deseó que el anuncio de Lacalle Pou finalmente no se concrete.
"Si se concreta lo que el presidente electo adelantó hoy creo que se estaría cometiendo un grave error", dijo Civila y agregó: "Uruguay ha tratado de aportar a la búsqueda de soluciones pacíficas que eviten mayores conflictos en la región y que permitan encontrar salidas democráticas y garantistas de la autodeterminación de los pueblos y los derechos humanos".
Así, consideró que Uruguay "lo ha hecho siendo fiel a los principios del derecho internacional, a su tradición histórica y a su carácter de país de paz".
"En este camino se han logrado avances importantes y esto le ha valido a Uruguay el reconocimiento internacional", continuó.
"Transitar este tipo de caminos en búsqueda de diálogos difíciles siempre supone incomodidades, menos declaracionismo y mucha acción negociadora. No se entendería que mientras se dice que no hay que valorar la política exterior con una mirada ideológica y se sostiene que la paz en la región hace también al interés nacional del país, Uruguay se retirara de estos esfuerzos, plegándose a posiciones que alientan la polarización y debilitando los caminos de diálogo y negociación", concluyó Civila.