La actividad económica en Argentina experimentó una caída interanual del 20,6 % en mayo pasado, moderando así el abrumador nivel de derrumbe que había registrado en abril por la parálisis provocada por las medidas de aislamiento adoptadas ante la pandemia de coronavirus.
El dato divulgado este miércoles por el Instituto Nacional de Estadística y Censos (Indec) y que sirve como anticipo provisional para medir la variación trimestral del producto interno bruto (PIB) muestra que la actividad económica logró en el quinto mes del año recuperarse un 10 % en comparación con abril.
En los primeros cinco meses del año, el indicador acumuló una caída del 13,2 %.
Los datos muestran una leve moderación respecto a los niveles de desplome interanual del 26,3 % de abril, un derrumbe sin precedentes en el país y que se produjo ante las fuertes restricciones sanitarias adoptadas por el Gobierno de Alberto Fernández.
En mayo, sin embargo, algunas de las medidas comenzaron a relajarse en algunas actividades y regiones del país, lo que permitió cierta reactivación.
"La mayoría de los distritos del país aplicaron un relajamiento de ciertas restricciones a la circulación y a la apertura comercial e industrial durante mayo, medidas que ciertamente ayudaron a que el desplome de la actividad sea más moderado que el observado en abril, pero la actividad económica continúa deprimida", observó la consultora Orlando Ferreres & Asociados en un informe.
De hecho, con la caída interanual registrada en mayo, la actividad económica acumuló diez meses en retroceso en Argentina, tras el leve avance del 0,4 % verificado en julio de 2019.
LOS SECTORES MÁS AFECTADOS
El informe del Indec revela que catorce de los quince sectores productivos incluidos en la medición arrojaron bajadas interanuales en el quinto mes del año.
De acuerdo con los datos divulgados este miércoles, los sectores de peso que mostraron mayores magnitudes de caída fueron la construcción (-62,2 %), la industria (-25,7 %), el comercio (-20,9 %), la minería (-20,3 %) y la agricultura (-10,7 %).
El único sector que mostró una mejora en términos interanuales fue la pesca, con un alza del 61,5 %.
Pese a la generalizada caída interanual, el informe oficial destaca que en mayo doce de los quince sectores medidos lograron moderar sus niveles de retroceso, "lo que refleja en parte la recuperación" en comparación con abril debido "fundamentalmente a una mayor flexibilización de las restricciones a la circulación, sobre todo en las provincias menos afectadas por la COVID-19".
PERSPECTIVAS NEGATIVAS
La economía argentina lleva dos años en recesión, con una caída del PIB del 2,5 % en 2018 y del 2,2 % en 2019, pero los efectos de la pandemia han profundizado el hundimiento.
Los expertos a los que mes a mes consulta el Banco Central argentino para su informe de expectativas pronostican que la economía del país se derrumbará un 12 %, superando el histórico desplome del 10,9 % registrado en 2002.
Respecto a las perspectivas, Orlando Ferreres señala en su informe que la pandemia es "tan solo el más urgente de los problemas" que afectan la economía argentina y apunta que, aunque el país supere la crisis sanitaria, "el débil estado de la macroeconomía atentará contra los esfuerzos de recuperación" de la actividad.
"En efecto, la aceleración del déficit primario financiado vía emisión por el banco central, dada la ausencia de otras fuentes de financiación, amenaza con una aceleración de la inflación y una mayor presión sobre la cotización de nuestra moneda", apuntó la consultora.
A esto se suma, según añade la firma, "una virtual parálisis en la inversión y una población con ingresos en niveles muy bajos, todo lo cual nos lleva a anticipar una lenta salida de la actual recesión".
EFE