Justicia condenó a más de 30 años de prisión al triple homicida de los marinos

La jueza penal de 45° turno María Noel Odriozola condenó a 29 años y seis meses de prisión a Jonathan Bragundi, que asesinó a tres infantes de marina el domingo 31 de mayo de 2020, informó El Observador y confirmó Montevideo Portal.  

Las víctimas fueron Juan Manuel Escobar, Alex Guillenea y Alan Rodríguez, quienes habían prestado servicio junto al homicida en un predio militar de la Fortaleza del Cerro de Montevideo conocido como La Antena, donde ocurrió el triple asesinato.

La jueza condenó a Bragundi “como autor penalmente responsable de un delito de homicidio muy especialmente agravado a la pena de 29 años y seis meses de penitenciaría, con descuento de la detención y medida cautelar preventiva cumplida, siendo de su cargo la obligación de pagar al Estado los gastos de alimentación, vestido y alojamiento conforme al art 105 literal e) del Código Penal”.

Además de la pena de prisión, Odriozola determinó el cumplimiento de medidas de seguridad eliminativas con un mínimo de un año y un máximo de nueve años, que comenzarán a regir una vez cumplida la penitenciaría impuesta.

Desde Fiscalía se informó que las medidas de seguridad eliminativas implican que una vez que se cumple con la condena inicial, la Suprema Corte de Justicia determina si se suman más años luego de cumplida la pena. 

El artículo 92 del Código Penal establece que las medidas de seguridad eliminativas se aplican a "violadores u homicidas que por la excepcional gravedad del hecho, derivada de la naturaleza de los móviles, de la forma de ejecución, de los antecedentes y demás circunstancias afines, denuncien una gran peligrosidad".

En el fallo de Odriozola, al que accedió Montevideo Portal, la magistrada señaló que se considera como agravante en los homicidios la “utilización de armas, la nocturnidad, el abuso de confianza para preparar, facilitar o consumar otro delito”.

“Los homicidios se cometieron para consumar otro delito”, agregó la jueza en la sentencia, en referencia a la intención de Bragundi de robarles las armas de reglamento a sus excompañeros. 

Atroz ejecución. Los criminales van a pagar ante la Justicia. Estamos junto a las familias de los tres soldados asesinados y a la @Armada_Uruguay en este día de luto nacional. Qepd.

— Javier García (@JavierGarcia_Uy) May 31, 2020

Los hechos 

La jueza actuante relató en la sentencia que Bragundi, de 26 años cuando ocurrió el crimen, ingresó a la vivienda de seguridad de la base de las Fuerzas Armada cuando se encontraban en el lugar cumpliendo funciones de vigilancia Rodríguez, Escobar y Guillenea.

“Bragundi conocía el lugar por haberse desempeñado como funcionario militar hasta el 22 de marzo de 2020. Luego de ingresar, dentro de la habitación destinada a dormitorio se encontraba durmiendo Juan Manuel Escobar Agosta, al que Bragundi le sustrae su arma de fuego marca Glock WMF937. Con ella se dirige hacia la pieza principal del recinto, que era utilizada como oficina y allí efectúa disparos primero contra Rodríguez y en segundo lugar con Guillena. Ambas victimas cayeron heridas fatalmente", relata Odriozola en el fallo. 

Acto seguido, Bragundi se dirigió nuevamente al dormitorio y efectuó múltiples disparos contra Escobar, "quien se encontraba totalmente indefenso puesto que como fuera mencionado, su arma de reglamento le había sido previamente sustraída por el imputado", señala la sentencia. 

"Realizados los tres homicidios de los funcionarios militares, Bragundi sustrae las armas de fuego de reglamento de las víctimas Rodríguez y Guillenea , y se retira caminando , en posesión de las tres armas y de los tres cargadores, sin forzar ningún elemento existente, para su ingreso o egreso”, se agrega.

En la mañana, consignó la jueza, los funcionarios militares encargados del relevo concurren al lugar y se encuentran con los tres militares muertos por disparo de arma de fuego.

Bragundi fue captura el 1° de junio de 2020, después de que se había desprendido de dos de las tres armas robadas, que igualmente fueron recuperadas por la Policía tras recibir llamadas anónimas.  

Odriozola agregó que tras encontrarse rastros de sangre en el calzado de Bragundi, el análisis genético arrojó que la sangre pertenecía a una de las víctimas.