El presidente de Brasil, Jair Bolsonaro, encabezó este miércoles el acto de investidura del nuevo ministro de Justicia, André Mendonça, y expresó su "respeto" por el Supremo, que le impidió poner al frente de la Policía Federal a un amigo de su familia.
En la ceremonia en que Mendonça sustituyó al exjuez Sergio Moro, quien renunció al cargo y denunció presiones políticas de Bolsonaro en torno a su despacho y la Policía Federal, el mandatario no citó una sola vez al exministro, pero abundó en la necesidad de "respetar la Constitución" y la "separación de poderes" que ella establece.
Tras unos breves elogios a Mendonça, hasta ahora abogado general del Estado, Bolsonaro insistió en que nombrar al comisario Alexandre Ramagem como director de la Policía Federal es "un sueño" al que no ha renunciado, pese al fallo judicial que lo objetó, y dijo que aún cree que "se concretará".
Mendonça, un pastor evangélico con sólida formación en derecho, hizo un discurso institucional y no aludió a ese conflicto, aunque alertó del "momento difícil" que atraviesa el país.
"Vivimos una crisis de salud", en alusión al coronavirus SARS-CoV-2, "y una crisis de instituciones", declaró el nuevo ministro, sin abundar en ese último punto.
Mendonça evitó otras referencias políticas y se centró en su "compromiso" con el "estado de derecho" y contra "la corrupción, el tráfico de drogas y armas, todos los crímenes contra la vida, el patrimonio, los niños, los adolescentes y la mujer".
También garantizó que su gestión estará guiada por "criterios técnicos" y agradeció su confianza a Bolsonaro, a quien calificó de "profeta del combate a la criminalidad".
El nuevo titular de la Abogacía General del Estado, José Levy, hasta hoy procurador general de Hacienda, asumió su cargo en el mismo acto y afirmó que "la democracia se fundamenta en la seguridad jurídica", que trazó como principal objetivo de su gestión.
LA ESTRATÉGICA DIRECCIÓN DE LA POLICÍA FEDERAL SIGUE VACANTE
En la misma ceremonia estaba previsto que Alexandre Ramagem asumiera la dirección de la Policía Federal, que ahora sigue vacante.
El nombramiento fue suspendido por el magistrado Alexandre de Moraes, uno de los once miembros de la Corte Suprema, quien atendió una demanda que denunciaba los estrechos lazos de amistad que unen al comisario con la familia Bolsonaro y objetó que asumiera un organismo al que la Constitucion le reserva autonomía.
Tras esa decisión judicial, el mandatario revocó el decreto en del nombramiento de Ramagem y ahora está dedicado a buscar un nuevo nombre para ese cargo, ocupado hasta la semana pasada por Mauricio Valeixo.
Este último fue destituido por Bolsonaro y esa decisión motivó la renuncia al Ministerio de Justicia de Moro, quien al anunciar que dejaba el Gobierno afirmó que el mandatario pretendía "interferir políticamente" en la Policía Federal y sus investigaciones.
En manos de ese órgano policial están algunas investigaciones que afectan a dos de los cuatro hijos de Bolsonaro, el senador Flavio y el concejal de Río de Janeiro, Carlos.
Pero la Policía Federal también será responsable de una nueva investigación, pedida por la Fiscalía General y autorizada por el Supremo, referida a las acusaciones de "interferencia política" y otras presuntas irregularidades que Moro vertió sobre el presidente Bolsonaro al anunciar su renuncia.
La Corte Suprema, también con la Policía Federal como brazo ejecutivo, investiga además unas manifestaciones convocadas por seguidores de Bolsonaro, a las que llegó a asistir el gobernante, en las que se exigió el "cierre" de ese tribunal y del Parlamento y se demandó una "intervención militar".
Con información de EFE