Lucas Lencina denunció en redes sociales que en la madrugada de este domingo 13 de marzo concurrió a un local bailable de Ciudad Vieja, ubicado en las inmediaciones de Rincón y Ciudadela.

Dice en su descargo: “fui agredido por los seguridad del local. Me rompieron parte de una paleta, me hicieron un traumatismo de cráneo en el cual me tuvieron que suturar, y me reventaron el ojo izquierdo”.

El joven cuenta: “todo comenzó por un intercambio de palabras entre una chica que estaba en el baile y una compañera que había ido con nuestro grupo. En ningún momento del intercambio de palabras hubo golpes. Cabe destacar que yo no formaba parte de la discusión”.

Agrega: “los guardias de seguridad se acercaron a donde nos encontrábamos nosotros, uno de ellos sin mediar palabras me hizo una llave y me bajó apretándome el cuello por toda la escalera del centro bailable. No podía respirar. La única resistencia que generé fue al momento de ahogarme por la falta de aire. En ningún momento le pegué ni hice el intento”.

“No quedaron contentos con asfixiarme a tal punto de no respirar y retirándome del lugar, sino que una vez fuera, me dieron un golpe de puño que hizo perdiera el conocimiento hasta el momento que ingrese al hospital. Fue tal el golpe que caí seco hacia atrás y fue en ese momento que me partí la cabeza y me hice dos tajos”, añadió.

“Difundo esto para que no siga ocurriendo, porque las probabilidades de haber muerto o incluso haber quedado con alguna secuela fueron muchas”, señala el joven de 20 años.

“Me cagaron el comienzo de año, mañana lunes arrancaría la facultad, pero claramente no estoy en condiciones de poder ir. Ojalá sirva para que no tengan como opción esta decadencia total, y para que no le ocurra a nadie más”. agregó.

Según supo Montevideo Portal, Lucas amplío la denuncia este lunes en la Seccional 1ra. de Montevideo. Será visto ahora por un médico forense que constatará sus lesiones.

Lucas, estudiante de Ciencias Sociales, contó que fue atendido en primera instancia en el Hospital Pereira Rossell y que luego fue derivado al Servicio Médico Integral (SMI).