El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, reveló este viernes que Israel propuso un nuevo plan para un cese el fuego con Hamás en la Franja de Gaza y exhortó al movimiento islamista palestino a aceptarlo para poner fin a casi ocho meses de guerra.

“Israel ha ofrecido una nueva y amplia propuesta. Es una hoja de ruta hacia un alto el fuego duradero y la liberación de todos los rehenes”, declaró el demócrata, de 81 años.

Sus declaraciones se producen horas después de que las tropas israelíes penetraran en el centro de Rafah, intensificando su guerra contra Hamás pese a los llamados internacionales para frenar la ofensiva terrestre en esta ciudad del sur de Gaza.

El plan de tres fases propuesto por Israel, según Biden, empezaría con una tregua que incluiría el retiro de las tropas israelíes de las zonas pobladas de Gaza por seis semanas y la liberación de algunos rehenes en manos de Hamás por presos palestinos.

El cese el fuego temporal podrá volverse “permanente” si Hamás “respeta sus compromisos”, detalló el mandatario estadounidense. La siguiente fase, precisó, incluiría la liberación de todos los rehenes.

El primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, reiteró sin embargo que la guerra solo terminará con la “eliminación” política y militar de Hamás, que gobierna Gaza desde 2007.

El conflicto se desató el 7 de octubre, cuando comandos islamistas mataron a 1.189 personas, en su mayoría civiles, en el sur de Israel, según un balance de la AFP basado en datos oficiales israelíes.

Los milicianos también secuestraron a 252 personas. Israel afirma que 121 permanecen secuestradas en Gaza, de las cuales 37 habrían muerto.

En respuesta, Israel prometió “aniquilar” a Hamás y lanzó una ofensiva aérea y terrestre que dejó hasta el momento 36.284 muertos en Gaza, según el Ministerio de Salud del territorio palestino.

“Es hora de que esta guerra termine”

“Es hora de que esta guerra termine, de que comience el día después”, subrayó Biden desde la Casa Blanca. “No podemos dejar pasar este momento”, añadió. El nuevo esquema propuesto por Israel se da a conocer tras repetidos fracasos para poner fin a la guerra.

El grupo islamista, considerado como organización “terrorista” por Israel, Estados Unidos y la Unión Europea, insiste en que cualquier alto el fuego debe ser permanente.

Su jefe político, Ismail Haniyeh, reiteró el viernes que las principales demandas de su organización -- incluido un alto el fuego permanente y la retirada total de Israel -- “no son negociables”.

En varias zonas del sur de Gaza, la vida se ha vuelto “apocalíptica” desde el inicio de la ofensiva terrestre israelí contra Rafah a principios de mayo, alertó el Programa Mundial de Alimentos de la ONU.

El ejército israelí anunció el viernes que sus “comandos operan en el centro” de la localidad, donde “destruyeron un depósito de armas” de Hamás.

También informó de la muerte de dos soldados en Gaza, lo que eleva a 292 sus militares muertos desde que Israel lanzó su ofensiva terrestre a finales de octubre.

Antes de que comenzase la operación israelí en Rafah, la ONU estimó que 1,4 millones de personas se refugiaban en la ciudad. Un millón habría huido desde entonces, según la Agencia de la ONU para los Refugiados Palestinos (Unrwa).

Testigos informaron de bombardeos israelíes cerca de Rafah y en Nuseirat, en el centro del territorio palestino.

Crisis humanitaria

El despliegue terrestre en Rafah permitió que Israel tomase el control del corredor Filadelfia, una franja de 14 kilómetros a lo largo de la frontera entre Gaza y Egipto.

El portavoz del ejército israelí, Daniel Hagari, acusó a Hamás de usar ese corredor para transportar armas hacia Gaza utilizando túneles.

El presidente egipcio, Abdel Fatah al Sisi, desmintió la existencia de estos túneles y acusó a Israel de buscar justificaciones para su ofensiva en Rafah.

Egipto e Israel se culpan del bloqueo del paso fronterizo de Rafah, crucial para la entrada de ayuda humanitaria en Gaza y cerrado desde que el ejército tomó el control del lado palestino a comienzos de mayo.

La ONU advierte frecuentemente del riesgo de hambruna en Gaza, bajo asedio israelí casi desde el inicio del conflicto.

La Oficina de Naciones Unidas para la Coordinación de Asuntos Humanitarios (OCHA), afirmó que “la ayuda que entra [en Gaza] no llega a la población”.

El jefe de la agencia de la ONU para los refugiados palestinos (Unrwa), Philippe Lazzarini, pidió a Israel que “cese su campaña” contra la agencia, en un artículo publicado en el New York Times.

Israel acusó a empleados de la UNRWA de estar implicados en el ataque del 7 de octubre de Hamás, provocando que varios países cesaran su financiación.

En el frente diplomático, el Parlamento de Eslovenia, país miembro de la UE y la OTAN, votará el martes una moción para reconocer a Palestina como Estado, después de que ya lo hicieran España, Irlanda y Noruega.

Y en Estados Unidos, los líderes de los demócratas y de los republicanos del Congreso invitaron a Netanyahu a pronunciar un discurso dentro de unas semanas ante los legisladores.

AFP