El ejército israelí aseguró este domingo haber descubierto “el mayor túnel” subterráneo construido por Hamás en la Franja de Gaza, donde Israel continúa con los devastadores bombardeos pese a los múltiples llamados a un alto el fuego.
“Esta red masiva de túneles, que se divide en varias ramas, tiene una extensión de más de cuatro kilómetros y llega hasta 400 metros del punto de paso de Erez”, entre Israel y el norte de Gaza, indicaron las fuerzas armadas del Estado hebreo en un comunicado.
La destrucción de la red de túneles construida por Hamás es uno de los objetivos de la ofensiva militar israelí en ese enclave palestino, donde murieron hasta 18.800 personas, según datos del ministerio de Salud gazatí.
Israel inició esos bombardeos y ocupación terrestre de la Franja después de los atentados de Hamás del 7 de octubre en Israel, en que perdieron la vida unas 1.140 personas.
Según un periodista de AFP que pudo entrar en el túnel descubierto, este dispone de sistemas de canalización, electricidad, alcantarillado, de ventilación y raíles.
La organización islamista palestina Hamás construyó en Gaza una red de 1.300 túneles, con una extensión de unos 500 kilómetros, para eludir el bloqueo que impuso Israel en el enclave desde 2007, según una estimación del Instituto de la Guerra Moderna de la Academia Militar estadounidense de West Point.
Presión interna e internacional
El gobierno del primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, está cada vez más presionado, sobre todo desde que se supo el viernes que soldados mataron a tres rehenes “por error” tras confundirlos con combatientes palestinos.
Los tres rehenes formaban parte de las cerca de 250 personas capturadas en el ataque sin precedentes de Hamás.
Cientos de personas se manifestaron el sábado en Tel Aviv. Luego acamparon delante de la sede del ministerio de Defensa para reclamar el regreso de sus familiares.
“Mueren demasiados civiles”, dijo la ministra francesa de Relaciones Exteriores, Catherine Colonna, en viaje a Israel, desde donde instó a “una nueva tregua humanitaria inmediata y duradera”.
Su homólogo israelí, Eli Cohen, reiteró la posición de su gobierno, para quien un alto el fuego es “un regalo para Hamás”.
El secretario de Defensa de Estados Unidos, Lloyd Austin, también estará en Israel, Baréin y Catar esta semana para reiterar “el compromiso de Washington en reforzar la seguridad y la estabilidad regionales”.
Estados Unidos, el mayor aliado de Israel, ha urgido estos últimos días una fase de “menor intensidad” en la operación israelí, para proteger a los civiles.
El jefe de la diplomacia británica, David Cameron, y su homóloga alemana, Annalena Baerbock, también llamaron a un “alto el fuego duradero”, en un texto publicado en el Sunday Times.
“Baño de sangre”
En el norte de la Franja se podían ver el domingo espesas humaredas tras los bombardeos israelíes.
El ministerio de Salud de Hamás dio cuenta de 24 muertos en el campo de refugiados de Jabaliya, muchos de los cuales están todavía “bajo los escombros”.
Otros bombardeos mataron al menos a 12 personas en la ciudad de Deir al Balah, en el centro del enclave. Testigos también informaron de ataques aéreos en la ciudad meridional de Bani Suheila, y AFPTV constató intensos combates en la ciudad de Gaza.
El servicio de urgencia del hospital Al Shifa, en el norte de Gaza, se ha convertido en “un baño de sangre”, con cientos de pacientes en el interior y nuevos heridos que llegan "cada minuto", afirmó la Organización Mundial de la Salud (OMS).
Los ataques israelíes han devastado gran parte del territorio y la ONU estima que 1,9 millones de gazatíes se han visto forzados a dejar sus casas.
El papa Francisco lamentó al final de la plegaria del Ángelus la muerte el sábado de dos mujeres en una parroquia católica en Gaza y afirmó que en este territorio hay “civiles indefensos” que son blanco de disparos y bombardeos.
En el enclave palestino, lograron restablecer el domingo por la tarde las telecomunicaciones después de que quedaran cortadas el jueves.
“Traer a los rehenes vivos”
Más de 100 israelíes y extranjeros capturados fueron liberados a cambio de 240 prisioneros palestinos durante una tregua de una semana en noviembre, auspiciada por Catar.
Pero según Netanyahu es necesario "mantener la presión militar" para traer a los rehenes y acabar con Hamás.
Catar confirmó el sábado que estaba llevando a cabo "esfuerzos diplomáticos para restablecer una pausa humanitaria".
Según la página de informaciones Axios, el jefe de los servicios de inteligencia israelíes, David Barnea, se reunió el viernes con el primer ministro catarí, Mohamed bin Abdulrahman al Thani, que participó en las negociaciones de la anterior tregua.
Hamás rechaza "cualquier negociación" si "la agresión contra nuestro pueblo no cesa completamente", según informó en Telegram.
Fuera de Gaza, la Autoridad Palestina lamentó el domingo la muerte de cinco palestinos en Cisjordania ocupada, donde la violencia se ha disparado desde el estallido del conflicto.
Adel Zaanoun con Gaël Branchereau para AFP