El legislador elevó un pedido de informes para saber las razones por las que se concretó la compra de unas 750 mil balas de punta hueca, las cuales están prohibidas por legislación nacional y convenciones ratificadas por nuestro país.
La compra habría sido realizada por el Ministerio del Interior y observada por el Ministerio de Defensa, según informó el senador Javier García en un comunicado.
García evalúa llamar a la Cámara Alta a los responsables de ambas carteras para que expliquen la situación y particularmente por qué se desestimó las observaciones y para qué fue realizada esa adquisición.
Las balas de punta hueca se caracterizan por su letalidad porque explotan al penetrar en la víctima.
Según la información que maneja el legislador las importación de esas balas se realizó sin la autorización del Servicio de Material y Armamento e ingresaron junto a otro material autorizado por la Aduana de Rivera, a fines de mayo de este año.
En noviembre del año pasado el Ministerio del Interior gestionó la autorización para el ingreso de esas municiones, sin dejar constancia de que el material ya estaba en nuestro país.