Sin hacer referencia a una turbonada, el Instituto Uruguayo de Meteorología (Inumet) publicó su informe final sobre lo ocurrido en el departamento de Paysandú. Desde el organismo informaron que se hizo trabajo de campo en el lugar, donde no se registraron daños relacionados a una “torsión o rotación”, sino que son daños “divergentes y unidireccionales, sin señales de giro sobre el suelo”.

“El reanálisis de la situación atmosférica indica un potencial para el desarrollo de tormentas fuertes y severas, favoreciendo rachas de viento descendentes. Se descarta la ocurrencia de un tornado, y se define el fenómeno ocurrido como una corriente descendente que afectó la ciudad de Paysandú la mañana del 11 de julio”, señala el comunicado del Inumet.

Por su parte, UTE publicó en su cuenta de Twitter que, a tres días de ocurrido el evento, se logró reestablecer el 86% de los servicios interrumpidos por este fenómeno meteorológico y que aún quedan 3.750 servicios por reponer.

“El nivel de daños en la red de baja tensión es muy importante: equivale a 300 km de línea afectados, además de subestaciones, postes y columnas”, señala el texto, y agrega que este jueves hay 30 equipos, 180 personas trabajando en la calle y 50 en lo que tiene que ver con la gestión y el control de la operativa.

“En otras zonas quedan servicios interrumpidos con dificultades de acceso por pasos cortados o terrenos anegados. Se sigue trabajando hasta lograr 100% de reposición”, concluye.

En tanto, desde el Sindicato Único Nacional de la Construcción y Anexos (Sunca) informó en un comunicado en el que informó que sus brigadas solidarias ya están en el lugar, trabajando y organizando futuras intervenciones luego de que más de 200 familias perdieran sus viviendas producto de esta corriente descendiente.

“Nuestro accionar siempre es el mismo la disposición a ayudar mediante la coordinación con los comités de emergencia departamentales e instituciones y organismos que se entiendan , en la jornada de ayer se armaron 8 cuadrillas , se hicieron tareas de acondicionamiento rápido en hogares que se encuentran muy afectados, desarme de estructuras que corrían riesgo , relevamiento en 5 barrios , entrega de canastas de emergencia , a pedido de la UTU para hogares muy complicados , al mismo tiempo se colaboró en el armado de una olla popular en una de las zonas más complicadas ,entre otras varias tareas de coordinación”, dice el comunicado del Sunca.

“Hoy nuestros brigadistas están prontos para desembarcar en el departamento como ya lo han hecho en otras oportunidades, resta la coordinación y llegada de materiales, cuestión que siempre es un poco lenta, pero esperemos que pronto se resuelva, una vez más la sociedad está llamada a responder, una vez los y las trabajadores de la construcción estamos dispuesto a volcar las horas que sean necesarias para rápidamente devolverle a las familias lo que la naturaleza les arranco en cuestión de horas”, concluye.

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