El martes 14 de febrero la Oficina Central Nacional (OCN) de Interpol España emitió una notificación roja respecto a un ciudadano uruguayo de 34 años, quien se encontraba requerido para el cumplimiento de una condena penal por un delito de lesiones.
En el país europeo se le impusieron dos años y tres meses de pena, y se encontraba prófugo; le restaban un año y 10 meses por cumplir.
Según informa el Ministerio del Interior de nuestro país, tras la emisión de la mencionada alerta se inició una investigación que apuntó hacia una finca en Solymar, donde podría encontrarse el requerido.
Con esa información, el pasado 17 de marzo un equipo del Departamento de Capturas Internacionales se apostó cerca del lugar.
Esa misma tarde se observó salir del lugar a un hombre con características similares a las del implicado. Se procedió entonces a su identificación, y resultó ser efectivamente la persona buscada.
El hombre fue detenido y el hecho fue comunicado a la Fiscalía de Flagrancia de 12° Turno. Conducido ante la Justicia, se dispuso el “arresto administrativo con fines de extradición”.
A su vez, se constató que el hombre posee una requisitoria pendiente en Uruguay desde 2016 por un delito de estafa, expedida por la Dirección de Hechos Complejos, por lo que esta Dirección fue informada y dará cuenta a la Fiscalía correspondiente.