El intendente interino de Maldonado, Juan Pígola, convocó este lunes a una reunión del Centro Coordinador de Emergencias Departamental (Cecoed) junto con directores de la comuna para analizar la situación sanitaria ante la circulación de dengue y chikungunya en el país.
Actualmente el departamento tiene dos casos activos, uno de cada enfermedad, que están siendo monitoreados de forma “permanente”, según informó la Intendencia.
Luego del encuentro, el vocero de la comuna, Darío Camacho, explicó que recibieron un pormenorizado informe del director departamental de Salud, Pablo García, quien advirtió que hay “luces amarillas”. En ese sentido, para prevenir la expansión de los virus y coordinar trabajos, la administración puso a disposición toda la logística que sea necesaria.
En el encuentro se propuso llevar adelante una jornada de “descacharrización” en todo el departamento, en el entendido que la prevención comienza desde casa, donde es necesario desprenderse de todo objeto abandonado que pueda favorecer al mosquito Aedes aegypti.
La Intendencia aportará, desde la dirección general de Obras, camiones y vehículos. A su vez, la dirección de Gestión Ambiental también se sumará con tareas en espacios públicos, instancia que comenzará el 2 de mayo y se llevará adelante junto al Ejército.
Por otro lado, Camacho subrayó el “rol activo” para ir “un paso adelante” que toma la comuna, y recordó que durante la pandemia se aportó personal e infraestructura para su combate. En este caso también la Dirección de Salud jugará un “rol fundamental”, según el vocero.
Por su
parte, García sostuvo que es importante “atacar las cosas a tiempo y trabajar
en prevención”.
El director departamental de Salud agradeció que la Intendencia se sume y colabore con la prevención y con la jornada de “descacharrización” que se llevará adelante. Sobre la enfermedad, el jerarca explicó que es viral y de transmisión por vectores, no de hombre a hombre. “Es del mosquito al ser humano”, manifestó.