La Intendencia de Canelones debe dos años de alquiler por el predio donde está ubicado el basurero municipal.
Se tratan de
40 hectáreas ubicadas en la localidad de Cañada Grande en Empalme Olmos. El pago de la renta se había acordado con el dueño
del predio en forma mensual, por un total de aproximadamente 70 mil pesos
uruguayos (más intereses).
De todas maneras, en varias oportunidades el gobierno departamental le expresó al propietario que se iba a efectuar el pago, pero no prosperó. El monto total de la deuda es de $ 2.028.675, informó el director general de Administración de la comuna, Pedro Irigoin.
A su vez, el coordinador del gabinete afirmó que la Intendencia se mantuvo en permanente contacto con el abogado del propietario y llegaron a un acuerdo para saldar la deuda en diciembre de 2022.
“Este tema surge tras la decisión política de no autorizar el sitio de la disposición final de residuos que era la opción final que nosotros teníamos”, dijo Irigoin a Montevideo Portal.
De igual manera, informó que se van hacer cargo de la deuda porque es 100% del gobierno departamental. También indicó que la decisión del Ministerio de Ambiente de no aprobar el sitio de la disposición final de residuos es parte de las “reglas del juego” y que están en “todo su derecho”.
La postura de la oposición
Consultado sobre la deuda, el diputado nacionalista Alfonso Lereté dijo a Montevideo Portal que los blancos ven con “absoluta preocupación la salud financiera de la Intendencia”. “Es muy poco creíble que nos digan que [la Intendencia] está en superávit”, agregó el legislador.
En este sentido, sostuvo que el intendente de Canelones, Yamandú Orsi, “necesita más que nunca” el fideicomiso de 44 millones de dólares que se aprobó. “Esta administración es muy mala manejando los dineros públicos y no solo pasa con este atraso”, detalló Lereté.
El legislador nacionalista afirmó también que hay varios municipios que “no tienen dinero para comprar repuestos de las maquinarias”. “En Empalme Olmos, los vecinos tomaron palas, carretillas con balastro y hasta un arado para hacer cunetas porque de la Intendencia no tiene respuestas”, indicó.
Además, sostuvo que se registró un episodio similar en el Municipio de La Floresta. “La Intendencia, desde el punto de vista de recursos, está quebrada. Necesita esos 44 millones de dólares [del fideicomiso], si no, no puede hacer ninguna obra, no puede hacer mantenimiento y, como en este caso, no puede pagarle la renta al propietario del campo”, afirmó Lereté.