El sábado pasado, la rápida acción del policía Daniel Abreu fue fundamental para salvar la vida de un bebé en la ciudad de Melo. Tal como informáramos, el agente y su compañero de patrulla acudieron con premura a tender un llamado por una emergencia de salud: un bebé con problemas respiratorios. Para el caso se había adjudicado otro patrullero, pero Abreu supo que ese coche, que se encontraba más lejos, tardaría demasiado en llegar.
La velocidad y la resolución hicieron la diferencia, ya que el agente arribó rápidamente al lugar y notó que el bebé no respiraba, por lo que no había tiempo para esperar ayuda médica o un traslado. Así las cosas, puso manos a la obra y llevó a cabo maniobras de reanimación, las que permitieron que el pequeño recuperara el aliento.
Por tal acción, el ministro del Interior, Luis Alberto Heber, envió al uniformado un mensaje de felicitación
Este jueves, a menos de una semana del incidente relatado líneas arriba, Abreu debió intervenir en una situación casi idéntica, y lo hizo con el mismo éxito.
Según informa el medio local La Red Independiente, en esta oportunidad el uniformado salvó la vida de una pequeña de 21 días, hija de un policía que reviste en la misma Seccional y turno que él.
De acuerdo con la citada crónica, los hechos se dieron de manera similar que en el caso anterior: la madre de la niña llamó en solicitud de ayuda para su hija, que se estaba ahogando. Abreu se dirigió de inmediato al domicilio indicado, practicó los primeros socorros a la criatura y luego la trasladó a un centro asistencial.