“¿Cuál diría que es el principal problema del país? ¿Y en segundo lugar?”. Esa fue la pregunta que Equipos Consultores formuló a más de 2.000 uruguayos en agosto último.
En las respuestas, casi la mitad de los uruguayos (46%) menciona a la “inseguridad” como principal o segundo principal problema del país, seguido por el “desempleo” (33%) y la “situación económica” (23%). Bastante por debajo se ubican la “educación” y los “problemas sociales”, ambos con el 11%, y luego el “gobierno” (6%), la “salud” (5%) y los “bajos ingresos” (5%).
Los resultados de la encuesta, divulgada por el noticiero Subrayado, dejan claro que la preocupación por la inseguridad es mayor en los estratos altos y medio altos y la preocupación por el empleo en los bajos.
Las menciones a la inseguridad eran muy altas en 2018 y 2019: en agosto de ese último año, que fue electoral, alcanzó un nivel cercano al 70%. Los niveles disminuyeron algo en plena pandemia, y más aún en 2021, cuando registró uno de sus mínimos en muchos años (29% en agosto de ese año). Luego, en los últimos dos años, ha vuelto a crecer, llegando al 46% (aunque aún no a niveles comparables a los que había hace 4 o 5 años).
Las referencias al desempleo han evolucionado de forma diferente. Eran muy altas en 2019 (44%), se incrementaron más durante el primer año de la pandemia (47%), llegaron a su mínimo en 2022 (25%) y este año volvieron a crecer hasta el 33%.
Por último, las referencias a la “situación económica”, que estaban por debajo del 20% en 2018 y 2019, comenzaron a crecer fuertemente durante la pandemia, y alcanzaron a un pico de 36% en 2022, para descender significativamente este año (23%).
Otros problemas han emergido recientemente y han desaparecido, como la preocupación por el “agua”, que en junio había trepado al 11% y ya en agosto pierde magnitud entre los temas más mencionados.
Las diferencias por nivel socioeconómico
No todos los segmentos poblacionales perciben las preocupaciones nacionales de la misma manera. Cuando se analizan los dos principales problemas nacionales en función del nivel socioeconómico de los entrevistados, se aprecian diferencias significativas. La preocupación por la inseguridad, si bien es alta en todos los estratos económicos, crece juntamente con la estratificación social. En los sectores socioeconómicos altos y medio altos, las menciones a la inseguridad llegan al 53% de la población.
La preocupación por el desempleo funciona en sentido contrario: crece a medida que disminuye la estratificación social. Entre los sectores socioeconómicos bajos, las referencias al desempleo como principal problema del país (43%) casi duplican las que se encuentran entre los sectores altos y medio altos (22%)