El último informe del Instituto Nacional de Estadística (INE) referente a la Encuesta Continua de Hogares (ECH) reveló que 170 de cada 1.000 niños menores de seis años son pobres. Para analizar este dato puede tenerse en cuenta que, en total, de cada 1.000 personas 88 son pobres, lo que quiere decir que entre los menores de seis años el porcentaje es muchísimo mayor.

El informe señala que el 8,8 % de los habitantes de Uruguay viven bajo la línea de pobreza. Sin embargo, el porcentaje sube a 17 % entre los menores de seis años.

En el grupo etario de seis a 12 años, el porcentaje de pobreza está en 16,5 %, número que baja levemente al 15 % entre las personas de 13 a 17 años.

Entre los adultos de 18 a 64 años hay un 7,4 % de pobreza, número que baja sustancialmente al 1,8 % entre los mayores de 65 años.

También hay clara heterogeneidad en la pobreza si se toma en cuenta la ascendencia étnico racial de las personas.

La población afrodescendiente es la que continúa registrando mayores niveles de pobreza. En 2019, la incidencia de la pobreza para las personas que declaran ser afrodescendientes es superior a la estimación para quienes declaran tener ascendencia blanca. Concretamente, entre los que declaran ascendencia afro hay un 18,7 % de pobreza, mientras que entre los descendientes de blancos hay un 7,4 % de pobreza.

En cuanto a la pobreza por hogares según el sexo de la jefatura, hay una mayor pobreza entre los hogares con jefatura femenina.

Según el informe, hay un 4,5 % de hogares pobres con jefatura masculina y 7,5 % de hogares pobres con jefatura femenina. Los números se mantienen bastante estables si se diferencia por región. En Montevideo, el 6,3 % de los hogares con jefatura masculina está por debajo de la línea de pobreza, número que asciende al 9,8 % en los hogares de jefatura femenina. En el interior, la proporción es de 3,4 % y 5,5 % respectivamente.

A grandes rasgos, esto quiere decir que 75 de cada 1.000 hogares con jefatura femenina están por debajo de la línea de pobreza, mientras que entre los hogares con jefatura masculina la cifra desciende a 45.