Varios uruguayos viajarán al exterior en julio, aprovechando que no se debe realizar cuarentena al volver si la persona recibió las dos vacunas contra el coronavirus. Lo que si se mantiene todavía es la obligación de presentar un test PCR negativo con 72 horas antes de viajar y una declaración jurada al ingreso.
Sobre este tema el ministro Daniel Salinas dijo que él "hubiera elegido viajar en otro momento epidémico" y pide a quienes viajarán que "extremen los cuidados en el exterior y al regreso".
En diálogo con Montevideo Portal, el infectólogo Homero Bagnulo señaló que "los viajes pueden tener diferentes tipos de motivaciones y a veces las motivaciones pueden ser determinantes".
"Están quienes pretender viajar por vacaciones, ahí estuvo la recomendación del ministro de postergar un poco las vacaciones. Eso parece una opinión y recomendación respetable y sumamente prudente. Por otro lado, estamos los que viajamos por tener a nuestras familias afuera y de repente hace tiempo que no las vemos. Ese es otro tipo de situación en la cual pesan otros factores", agregó.
Bagnulo señaló que "el aislamiento que hemos sufrido todo este tiempo también es un peso". "Eso pasa por las decisiones personales y lo que pesa cada elemento en la toma de decisiones. Siempre hay evaluación de riesgo versus beneficios, esa es la ecuación. Si alguien puede postergar el viaje dos o tres meses, y el beneficio no va a ser muy grande, a lo mejor es una variable a tener en cuenta", añadió.
Sin embargo, el infectólogo comentó que "nadie nos asegura que dentro de dos o tres meses no reaparezca alguna variante y la situación pueda estar complejizada". "En este momento, por ejemplo, en Indonesia llegó la variante Delta (de India) y la gente de vuelta empezó a enfermar, porque aparentemente la vacuna que han dado no cubre suficientemente y si bien parece que la mortalidad es menor los casos aumentaron, pese a la vacunación", señaló.
En ese sentido, Bagnulo sostuvo que Reino Unido está viendo un aumento muy modesto de casos, pero vinculados a la variante Delta". "Estamos expuestos a que haya una nueva variante e inclusive a que parte de la gente que viaja, dependiendo a la parte que vaya, pueda introducir la variante Delta. Eso es un riesgo, sin lugar a duda", agregó.
El infectólogo comentó que "igual riesgo hemos corrido vinculado al ingreso de la variante P1 de Brasil, que fue un riesgo calculado en base a la situación".
"Que puede haber variantes que escapen de la acción de las vacunas eso sigue siendo una amenaza pendiente. Quedan poblaciones no vacunadas y que serían las menos convenientes de que viajen. Las personas que están plenamente vacunadas con 15 días luego de la segunda dosis deben evaluar riesgo-beneficio", aseguró.
Por último, Bagnulo cree que la decisión dependerá de la persona, por su edad y beneficios que obtenga del viaje. Sobre esos beneficios opinó: "Puede ser tomarse unas vacaciones o beneficios mayores, como irse a hacer un tratamiento específico o especial. Esa persona puede tener justificado su viaje".