La Justicia formalizó la investigación del expolicía que fue detenido por dejar una nota firmada y una bolsa con huesos a nombre de la Juventud Uruguaya de a Pie (JUP) en la casa de una activista de derechos humanos, integrante del colectivo Casa Mario.
Tal como solicitó el fiscal de Flagrancia de 8º Turno, Fernando Romano, como medidas cautelares el hombre imputado deberá cumplir con cuatro meses de arresto nocturno. Además, tiene prohibido acercarse y comunicarse con la víctima y usar armas. El imputado deberá fijar su domicilio, que será controlado de forma aleatoria durante el arresto nocturno.
El expolicía de 78 años, que cumplió funciones durante la década del 60, fue imputado por los delitos de violencia privada agravada en reiteración real.
El fiscal Romano destacó que la víctima estuvo presente en la audiencia y estuvo “de acuerdo” con las medidas que se le impusieron al agresor. La acompañó el consultorio jurídico de la Universidad de la República.
La investigación contra el expolicía iba a ser formalizada el pasado miércoles, pero el fiscal pidió una pericia caligráfica para determinar si la letra que acompañaba la bolsa con huesos coincidía con la del entonces detenido.
Según el relato de la denunciante, las personas que viven en la casa salieron al patio y encontraron la bolsa negra que contenía los huesos. Una de las cartas, según informó Telemundo y confirmó Montevideo Portal con fuentes de la Policía, decía: “Topolansky asesina sucia”.
Otro de los mensajes expresaba: “Giles, acá hay huesos, no hay cuarteles. Sigan escarbando, ojo, pueden repetir el plato”. Según la mujer que presentó el reclamo formal, esta carta estaba firmada por la JUP, un movimiento de estudiantes de extrema derecha de los años 70.