Impacto de sequía llega a US$1.800 millones, con “quebranto” en soja y maíz, dijo Mattos

El Ministerio de Ganadería, Agricultura y Pesca (MGAP) realizó este lunes una nueva evaluación del impacto de la sequía, en una comparecencia en el Parlamento, donde estimó cifras de las pérdidas económicas.

A nivel general, el Gobierno alertó ahora que las pérdidas serán de al menos US$ 1.800 millones en el sector, dijo el ministro de Ganadería, Fernando Mattos, en su presentación del lunes 10 ante la Comisión de Ganadería, Agricultura y Pesca de la Cámara de Diputados.

Un cálculo primario del Poder Ejecutivo, realizado a principios de febrero, cuando todavía había una expectativa favorable sobre algunos cultivos que luego no se concretó, preveía pérdidas de US$ 1.100 millones.

Mattos también consideró “prácticamente un hecho que va a haber una reiteración” de la declaración de emergencia agropecuaria, que en principio fue decretada hasta fines de abril.

Desagregado por rubro, el ministro alertó sobre un “quebranto muy importante”, tanto en la producción de soja como de maíz.

Las estimaciones son que la cosecha de soja será de unas 800.000 toneladas, más de tres veces menos que lo producido el año anterior.

“En agricultura, en términos generales, vamos a tener un quebranto productivo en el principal cultivo, que es la soja, que, con relación al año pasado, este año debe superar las 2.000.000 de toneladas. Así que seguramente tendremos una cosecha inferior a 1.000.000 de toneladas —estimamos que puede estar en el entorno de las 800.000—; aún así, lo que se pueda cosechar, con temas de calidad, seguramente será visible al momento de finalizar la cosecha”, dijo Mattos.

En cuanto al maíz, la cosecha de primera, que son los sembrados temprano, están arrojando en el entorno de 2.500 y 3.000 kilos, contra un promedio de casi 5.000 kilos cosechados habitualmente, explicó el ministro. “Y muchos de los maíces de segunda, que pasan a ser el área más importante, pasaron a picado porque no había condiciones de cosecha”, afirmó Mattos.

La ganadería, por su parte, va a ser afectada en la reproducción. El jerarca dijo que todavía es “muy aventurado” poner una cifra sobre este asunto, pero consideró como un escenario posible entre un 12 o 13% menos de disponibilidad para las faenas.

“La vitivinicultura también arrojó un quebranto productivo, y se calcula que la producción tendrá una reducción del 30 o 35%. Por lo tanto, cosecharemos unos 60.000.000 de kilos de uva, que es una reducción importante en relación al año pasado, aunque con un nivel de calidad de concentración de azúcares que determinará un tenor alcohólico muy importante de los vinos de la zafra de 2023”, afirmó también Mattos.