Llegaron las PASO, la contienda previa que definirá quienes competirán en octubre por la presidencia de Argentina y los escaños del Congreso. Los escenarios de los tres bandos con mayor porcentaje de intención de votos son notoriamente diferentes.

En La Libertad Avanza (LLA), Javier Milei no tiene competidores. La oficialista Unión por la Patria (UP) tiene dos candidatos, Sergio Massa y Juan Grabois. Sin embargo, todas las encuestas desde que ambos confirmaran sus postulaciones dan por ganada la contienda al actual ministro de Economía.

En Juntos por el Cambio (JxC) la puja por el lugar a octubre es mucho más reñida, ya que dependiendo del sondeo que se lea, es a quién ponen como ganador del duelo entre Patricia Bullrich y Horacio Rodríguez Larreta. 

El combate electoral entre ambos miembros de Propuesta Republicana (PRO) no sólo definirá quien será el candidato de la coalición macrista para buscar el cambio de signo en la Casa Rosada, sino que también significará una elección de los votantes por una línea que busca mano dura y un viraje más pronunciado o por una dirección más moderada.

Un tema de ornitología

El inicio de los años noventa, para el Club Atlético Boca Juniors fue una época marcada por un plantel dividido. Por el bando de los Halcones y el de las Palomas. Un grupo liderado por el Beto Márcico y el otro el Mono Navarro Montoya. Una lucha de egos y de diferencias que pasó a la historia con el nombre de ambos bandos. A unos les “gustaba el champagne, la pizza y las motos de esquí” y a los otros “el agua mineral” y salir con “novias o señoras”, como dijo en 2017 Navarro Montoya. De ahí, en la idiosincrasia argentina quedaron las imágenes de estas aves, que hoy, pasan al plano electoral.

En este otro cuadro del que también supo ser presidente Mauricio Macri, Juntos por el Cambio, también hay halcones y palomas.

Los primeros respaldan a la exministra de Seguridad y la diferencia que les da el nombre es que apuntan a la mano dura para solucionar los problemas del país. Al otro bando, el del jefe de Gobierno de Buenos Aires, los tildan de tibios, por sus posturas más moderadas y su mayor tendencia al “dialoguismo” frente al gobierno nacional de cara al periodo previo a octubre. Bullrich ha cuestionado en varias ocasiones las políticas en educación del gobierno capitalino, así como su manejo de las tensiones con piqueteros, manifestantes y gremios.

Otro ejemplo de este ida y vuelta entre ambos bandos fue el cruce protagonizado en julio entre los dos candidatos a vicepresidente, ambos de la Unión Cívica Radical: el actual gobernador de Jujuy, Gerardo Morales, segundo en la lista de Larreta, y Luis Petri, diputado por Mendoza, que acompaña a Bullrich.

Desde junio el gobierno jujeño se ha enfrentado a piquetes y movilizaciones de organizaciones contrarias a la reforma de la constitución provincial. En julio, una turista se descompensó y murió en un corte de ruta, lo que llevó a Petri a recomendar a los visitantes que no fueran por un tiempo a Jujuy.

“La tibieza genera pobreza y caos. Los piquetes tienen de rehenes a miles de familias que soñaron sus vacaciones hace meses. Lo mismo pasa con comerciantes, artesanos, hoteles y posadas, que invirtieron y ahora pueden perderlo todo. No podemos seguir dejando que unos pocos secuestren a la mayoría de los argentinos. No hay excusas cuando se trata de aplicar la ley y el orden. No se negocia con los secuestradores”, escribió en ese entonces el candidato vice de Bullrich cuestionando a Morales, según recuerda TN.

Desde Jujuy, el gobernador le respondió: “Lamento que intentes aprovecharte de esta situación. Lo entiendo porque somos rivales, pero debemos recordar que, después del 13 de agosto, vamos a tener que trabajar juntos por el país. Como nunca te tocó gestionar o gobernar, no comprendés lo que se necesita para terminar con un estado paralelo de más de 15 años de violencia y corrupción, con Milagro Sala y su mafia presa”.

Este ejemplo, uno de tantos en la subida exponencial de tensión entre ambos bloques muestra un enfrentamiento dialéctico y críticas cruzadas al mismo nivel que el que miembros de Juntos por el Cambio han tenido hacia el oficialismo peronista. Pero ahora, en la previa de las PASO, era entre ellos.

El corte entre halcones y palomas no responde a partidos o fuerzas ideológicas que integran la coalición, como puede ser el caso de Unión por la Patria, donde las diferencias entre bloques responden a las de las filas que integran. Es decir, Fuerza Renovadora respalda a su líder, Massa, a cal y canto, mientras que kirchneristas y el bando de Alberto Fernández lo apoyan en pos de la “unidad”, y la izquierda peronista se inclina por Grabois.

En el caso de Juntos, la brecha cortó los dos principales partidos, el PRO y la UCR. El ejemplo vuelven a ser Morales y Petri, o los mismos Bullrich y Larreta. En ambos casos, a pesar de ser integrantes del mismo partido, pasaron a formar listas transversales detrás de cada candidatura.

En el bando de las palomas han apuntado a sus rivales políticos atribuyéndoles la responsabilidad de esta brecha y buscando mostrar la famosa “unidad” para el lunes posterior a las elecciones. Según informó el portal Letra P, la semana pasada se dieron negociaciones, impulsadas por el larretismo y respaldadas por Macri (el principal de los halcones), para que la noche de las PASO ambos candidatos compartan búnker. Al final, Bullrich aceptó.

El rol de Macri, a pesar de ser el más importante apoyo de Bullrich, ha trascendido esa brecha, como líder del PRO, en ocasiones como al lograr que ambos candidatos respaldaran la precandidatura de su primo, Jorge Macri, para ser jefe de gobierno de la ciudad de Buenos Aires. Ninguno se decantó por el radical Martín Lousteau. Esta unificación se selló de manera simbólica, con una foto en el cierre de campaña de los dos Macri, Bullrich y Larreta, todos sonrientes.

Esa otra foto, la definitiva, la que Macri quiere lograr en el búnker, será la que dirá, una vez que se sepa quién gane, si halcones y palomas podrán volar juntos hacia octubre, de forma de lograr ese cambio que propugnan en los carteles publicitarios de su coalición.