El crimen de la adolescente argentina Lola Chomnalez sigue parcialmente impune, debido a que un hombre fue procesado por este caso, pero no se le pudo imputar la autoría del asesinato, sino solo su coautoría, por lo que aún resta encontrar por lo menos a otro sujeto, que fue quien dejó su sangre en la mochila de la joven.
El abogado de la familia de Lola, Juan Raúl Williman, dijo a radio Universal que "seguramente haya audiencia en los próximos días" ya que el corte parcial que produjo la pandemia en el área judicial dejó "pendientes" y hay declaraciones por tomar.
Consultado acerca de si espera poder encontrar a quien asesinó a la joven, Williman dijo que "guarda la esperanza" de que sea así, aunque "el tiempo nos juega en contra".
"Tenemos, ratificado por un Tribunal de Apelaciones, a uno de los copartícipes, y entendemos que a partir de ahí tenemos una chance de encontrar al otro copartícipe, tal vez al autor material. Lo que está claro es que nos falta una persona que dejó su sangre en la mochila de Lola", apuntó el abogado.
Williman señaló que "hay varias hipótesis" sobre cuántas personas participaron del homicidio, aunque seguro son "no menos de dos" y "seguramente" no sean más de tres. "Nos inclinamos a dos y está faltando la persona que dejó esos registros genéticos en las pertenencias de la adolescente, y por eso hay que seguir trabajando", concluyó.
En diciembre de 2019 un Tribunal de Apelaciones confirmó el procesamiento de Ángel Moreira (apodado "El Cachila"), de 33 años, por su participación en el crimen de Lola. El procesamiento se había dictado el 20 de mayo de ese año.