La senadora blanca Graciela Bianchi volvió a referirse a la elección de la fórmula del Partido Nacional por parte del candidato, Álvaro Delgado. Luego de manifestar que la forma de comunicar que su candidata a vicepresidenta sería Valeria Ripoll fue “desprolija”, Bianchi reconoció atributos de la exsecretaria general de Adeom, aunque admitió que el “plan A” para ese rol era la ministra de Economía, Azucena Arbeleche.

La nacionalista señaló que Delgado debió dar “un volantazo” en la elección de la fórmula. “Lo que hizo Álvaro fue un volantazo, un cambio de paradigma, como lo llama él; un acto de fe, que eso siempre tiene riesgos. Hay que tener valor para hacerlo”, dijo en diálogo con el programa Desayunos informales (Canal 12) este miércoles. “Esto lo fui procesando, pero, si hacés más de lo mismo, no te van a rendir las cosas”, sostuvo.

Bianchi dijo que fue “de las sorprendidas”, pese a que “sabía que había un plan B” y que “podía presumir” que se trataba de Ripoll. “Al hacer las giras, uno sabe leer los movimientos, la gestualidad”, detalló.

Cuando se le mencionó el nombre de Azucena Arbeleche como plan B, expresó: “Ese no era el plan B, ese era el plan A. Había otros planes A, yo no porque a mí me gusta la dialéctica de la discusión”.

“Como dije, había que haber preparado un poco más, pero lo que condicionó fue fundamentalmente la enorme diferencia entre Álvaro y Laura. No esperábamos tanta diferencia”, admitió.

Con respecto a la reacción de Laura Raffo en la noche del 30, al darse a conocer la elección de la fórmula, comentó: “No es fácil asumir el trabajo, el esfuerzo y, de golpe, recibir un impacto de ese tipo”.

Igualmente, enfatizó: “Los más cercanos a Álvaro sabíamos que había un plan B, y es verdad, porque yo lo he comprobado dolorosamente que es muy difícil mantener en secreto determinadas cosas: las paredes oyen”.

Por eso, dijo que le “consta” que “personas de Aire Fresco que están en el circulo chico no lo sabían”.

“Valeria tiene un perfil que, para mí, que yo no soy feminista radical, ella tampoco, es el ejemplo de mujer. Tiene militancia política, militancia sindical, familia, no se victimiza, fue atacada duramente”, consideró.

“Ella tiene un hijo con TEA [trastorno del espectro autista], en ese aspecto, reconozco que ella tiene una sensibilidad que yo no tengo”, señaló. “Si hay un cargo que yo nunca hubiera aceptado es el de vicepresidenta. Valeria tiene ese perfil, yo no tengo ese perfil”, agregó.