El Ministerio de Relaciones Exteriores emitió un comunicado este martes en donde rechazó publicaciones que realizó la cuenta oficial de Twitter de la Secretaría de Naciones Unidas, donde se afirmó que la "industria cárcnica es responsable de más emisiones de gases con efecto invernadero que las mayores empresas mundiales de petróleo" y que la "producción de carne contribuye al agotamiento de los recursos hídricos y la deforestación.
Según indica el comunicado, la respuesta será contestada a la ONU a través de los canales oficiales. "En particular, en el entendimiento de que esta cuestión forma parte de un conjunto más amplio de postulados contemplados en campañas sociales respaldadas por la Organización, que condenan la producción y el consumo de carne, se considera oportuno formular ciertas aclaraciones sobre el fondo de este asunto", señala el texto.
Por otra parte, el comunicado indica que las "comparaciones simplistas y aisladas" del impacto ambiental de las actividades llevan a "confusiones" y "parecen responder a movimientos activistas e intereses poco transparentes".
"Este tipo de campañas, no sustentadas en todos los elementos necesarios para su análisis, refuerzan los malentendidos y desvían el enfoque de las negociaciones pertinentes en esta materia, no contribuyendo al abordaje integral del asunto", señala el comunicado.
En tal sentido, indican que el campo tiene una serie de servicios ecosistémicos de primordial importancia para la sociedad, como es la producción de alimentos y fibras, regulación climática, almacenamiento de agua, retención de suelos, control de erosión, mantenimiento de recursos genéticos y la biodiversidad, provisión de hábitat y ciclado de nutrientes, entre otros.
"Las carnes son fuente de proteínas de alto valor biológico y micronutrientes que cumplen con importantes funciones como el hierro y el zinc, los cuales juegan un papel fundamental en etapas claves de la vida como el embarazo y la infancia y la adolescencia. La evidencia científica señala y así lo expresa la Guía alimentaria para la población uruguaya (MSP 2016) que la alimentación basada en una gran variedad de alimentos naturales de origen vegetal -como verduras, frutas, porotos, lentejas y garbanzos, fideos, arroz o polenta- combinados con cantidades moderadas de alimentos naturales de origen animal -como huevos, leche y carnes- se asocia con un buen nivel de salud y bienestar, y una incidencia más baja de enfermedades", concluye el comunicado.