El canal catarí Al Jazeera dejó de ser retransmitido en las televisiones israelíes, después de que el Gobierno aprobase este domingo el cierre de la cadena, muy activa en la cobertura de la guerra en Gaza, por “dañar la seguridad del Estado”.

“De acuerdo la decisión del Gobierno, las retransmisiones del canal Al Jazeera se han detenido en Israel”, se podía leer hoy en un mensaje en hebreo al intentar sintonizar el canal.

Según un vídeo compartido en redes sociales por el ministro de Comunicación israelí, Shlomo Karhi, en su cuenta de X, inspectores del Ministerio de Comunicaciones, junto a policías, registraron las oficinas de Al Jazeera en el Hotel Ambassador, en el territorio ocupado de Jerusalén Este, y confiscaron sus equipos.

La Asociación de Prensa Extranjera (FPA) de Israel, que representa a los periodistas que cubren el país y los territorios palestinos para medios extranjeros, dijo este domingo que, “con esta decisión, Israel se une a un dudoso club de gobiernos autoritarios que han prohibido la emisora”.

Según el grupo, la decisión debería preocupar a todos los que apoyan una prensa libre. “Es un día oscuro para los medios. Es un día oscuro para la democracia”, sentenció en un comunicado.

Tras la votación este domingo del Ejecutivo, el primer ministro, Benjamín Netanyahu, dio las gracias a Karhi, quien impulsó la conocida como 'Ley Al Jazeera', que permite al Gobierno clausurar, durante plazos renovables de 45 días, cualquier emisora extranjera que considere que daña la seguridad del país.

Conseguir información de primera mano sobre qué está sucediendo en la Franja de Gaza resulta difícil, debido a que Israel impide la entrada de la prensa internacional al devastado enclave palestino, donde ya han muerto más de 33.000 personas.

Al Jazeera es uno de los canales con mayor despliegue y periodistas en la Franja y desde octubre ha informado sobre bombardeos de hospitales, ataques contra edificios residenciales y la muerte de gazatíes no armados, lo que según expertos podrían ser considerados crímenes de guerra.

Además, varios de sus periodistas, como Hamza Wael Dahdouh o Mustafa Thuria, han perdido la vida en bombardeos israelíes. Otros corresponsales estrella como Wael Dahdouh han visto morir a la mayoría de sus familiares.

En tanto, el grupo terrorista Hamás lamentó que el Gobierno israelí votara este domingo por unanimidad el cierre de la emisión del canal catarí Al Jazeera en el país, y lo consideró la “culminación” de una guerra declarada contra los periodistas, en un conflicto en el que ya han muerto más de un centenar de ellos.

“Es una violación flagrante de la libertad de prensa y una acción represiva y de represalia contra el papel profesional de Al Jazeera al exponer los crímenes de la ocupación”, dijo hoy Hamás en un comunicado oficial, en el que pidió a las instituciones internacionales de derechos humanos y de prensa que “tomen medidas punitivas” contra Israel.

“Llega como culminación de la guerra declarada contra los periodistas, que son sometidos al terrorismo sionista sistemático con el objetivo de ocultar la verdad”, añadió Hamás, recordando a los periodistas muertos en ataques israelíes como Shirin Abu Aqil, Hamza al Dahdouh o Samer Abu Daghqa.

Con información de EFE