El ministro de Gobierno de Bolivia, Eduardo del Castillo, cotejó la posibilidad de que la fuga de Sebastián Marset, que sucedió hace un mes, se diera gracias al apoyo de integrantes de la Policía. Según recoge el diario local El Deber (Santa Cruz de la Sierra), el jerarca dio una conferencia de prensa sobre los “avances cualitativos” de la operación León 23, cuyo objetivo es atrapar al narcotraficante uruguayo, así como desarmar la organización criminal que lidera en Bolivia.
“No dudo y no elimino esa probabilidad de que hubiesen existido policías que hubieran ayudado a facilitar la fuga de este sujeto”, dijo Del Castillo, que también señaló a autoridades judiciales.
“No podemos descartar que haya existido un favorecimiento de algunos policías, fiscales e incluso jueces, porque hemos encontrado muchas trabas dentro de este proceso de investigación”, apuntó el ministro, que anunció que se comenzarán a realizar acciones de contrainteligencia con la participación de personal civil.
Señaló que el informe que se elaborará a raíz de estas acciones se remitirá al viceministro de Régimen Interior y Policía, Jhonny Aguilera, y que en caso de que se hallen personas (efectivos o civiles) que hayan ayudado al narcotraficante en su fuga, serán aprehendidos.
“Sean policías, fiscales o jueces que han ayudado a que no encontremos a Marset, van a ser procesados”, aseveró.
Según informa El Deber, tanto el director nacional de la Fuerza Especial de Lucha contra el Narcotráfico (Felcn) Ismael Tito Villca como el jefe antidroga de Santa Cruz, Yumer Dante Justo Condori, declararon en calidad de testigos por la causa Marset. Esto se debe a que el narcotraficante, cuatro días después de su fuga, envió un video en el que agradecía al director de la Felcn por haberlo alertado para huir “en el tiempo oportuno”. El alto mando de la Policía Boliviana emitió un voto de respaldo a favor de Villca.
También declaró ante la fiscal Delmy Guzmán Julio César Cossío, exdirector de la Fuerza Especial de Lucha contra el Crimen de Santa Cruz.
Marset se habría instalado en Santa Cruz hace más de un año y habría usado tres identidades: su nombre real; su identidad boliviana, Gabriel de Souza Beumer, y la brasileña, Luis Paulo Amorín Santos. Huyó de la ciudad el 29 de julio.
“Hemos llegado a identificar, 48 horas más tarde, el lugar donde Marset habría grabado el primer video y donde se había trasladado con parte de su familia, pero cuando solicitamos los allanamientos, hemos encontrado bastantes deficiencias, trabas y negligencias. Pese a eso, no hay un minuto que estemos descansando y cualquier información que recibimos en las redes sociales, en la Policía o en el exterior, la procesamos. No hay un solo informe que no descartemos. Por eso ofrecimos la suma de 100.000 dólares a quienes den datos precisos para la ubicación Marset”, informó el ministro Del Castillo.
Este martes viaja a La Paz el ministro del Interior de Argentina, Eduardo de Pedro, para aportar a las autoridades bolivianas información relevante al caso. El jerarca argentino va a presentar personalmente los datos “para preservar la confidencialidad de la información”, según dijo Del Castillo.