La Fiscalía informó que en las últimas horas dos personas fueron formalizadas por realizar fiestas durante la pandemia, algo que está prohibido por orden del Poder Ejecutivo para lograr frenar la curva de contagios de coronavirus.

El delito que se les imputó a ambos, que no están relacionados entre sí, es el de desacato.

Fiscalía señaló que el pasado sábado, la fiscal de Dolores Virginia Sigona imputó y logró la condena mediante un proceso abreviado de un hombre que organizó en la noche del viernes una fiesta privada con la asistencia de más de 100 personas.

El hombre fue notificado en dos ocasiones esa misma noche del incumplimiento de las medidas sanitarias dispuestas por el decreto presidencial 93/2020, pero la fiesta continuó en otro lugar, por lo que se ordenó la detención del organizador.

Finalmente fue condenado a la pena de cuatro meses de prisión que se cumplirán en la modalidad de libertad a prueba, por lo que deberá presentarse una vez por semana en la seccional policial de su domicilio y prestar servicios comunitarios.

En otro hecho, el fiscal de Mercedes Carlos Chargoñia imputó también el sábado a un hombre que es dueño de una cantina a la que asistieron más de 100 personas al mismo tiempo.

En la madrugada del día sábado, policías de Cardona fueron al Club Social y Deportivo Unión de Cardona ante una llamada anónima que denunciaba la realización de una fiesta.

Allí se constató una aglomeración de personas, "en un número superior a 100, en su mayoría jóvenes y algunos menores de edad, bebiendo alcohol y escuchando música en la cantina del club y en un patio interno", dice el documento de formalización.

En la audiencia de formalización, el imputado aceptó su responsabilidad en la situación, "que estaba en pleno conocimiento de las disposiciones vigentes referentes a la aglomeración de personas", pero afirmó que "no organizó ningún tipo de reunión, que empezó a llegar mucha gente y la situación lo desbordó".

El fiscal Chargoñia solicitó la medida cautelar de fijar domicilio y la obligación de presentarse una vez por semana en la seccional policial cercana a su casa durante 45 días, mientras continúa la investigación.