La agencia calificadora Fitch Ratings recortó este jueves la nota soberana de China de “A+” a “A”, citando el deterioro de sus finanzas públicas y una trayectoria de rápido aumento de la deuda en el marco del proceso de transición económica del país.
En su comunicado, Fitch explicó que el recorte responde a la expectativa de un aumento sostenido del déficit público, impulsado por medidas de estímulo y una política fiscal expansiva: se prevé que el déficit alcance el 8,4% del PBI en 2025, frente al 6,5% registrado el año pasado.
A pesar del ajuste, la perspectiva de la calificación se mantiene estable, lo que sugiere que la agencia no anticipa recortes adicionales en el corto plazo.
Impacto de la guerra comercial
El anuncio de Fitch se conoció horas después de que el presidente estadounidense Donald Trump anunciara una nueva ronda de aranceles globales, con gravámenes de hasta un 34% para productos chinos, que se suman a los 20% ya vigentes desde principios de año.
No obstante, Fitch aclaró que el impacto de estos nuevos aranceles no fue incorporado en la evaluación, dado su nivel de incertidumbre, aunque expertos advierten que podrían afectar la frágil recuperación económica china, en un contexto ya tensionado por la crisis inmobiliaria y la caída del consumo interno.
China aspira a un crecimiento del 5% para 2025, apoyado en estímulos fiscales y el impulso a las exportaciones, que alcanzaron un récord en 2024. Sin embargo, la intensificación de la guerra comercial podría poner en riesgo ese objetivo.
Con información de AFP