El fiscal de 2º Turno de Atlántida, Ignacio Montesdeocar, solicitó la pena máxima para el femicida de Natalia Lagos, mujer de 23 años que fue secuestrada y asesinada en agosto de 2023 en el peaje de Soca, según informó el director de Comunicación de Fiscalía, Javier Benech.
El letrado pide una pena de 30 años más 15 años de medidas eliminativas, “la pena máxima que existe en nuestro ordenamiento jurídico”.
“Además, se solicita obviamente, como es habitual en estos casos, el pago de 12 salarios mínimos a los representantes de la víctima”, informó el jerarca.
El principal delito, el “más gravoso”, es por homicidio muy especialmente agravado por femicidio, además de imputársele reiterados delitos de violencia doméstica, privación de libertad, desacato. “Un combo de varios delitos”, señaló Benech.
“Las medidas eliminativas se suman a la pena, o sea que en este caso podría llegar a una reclusión de 45 años, que es el máximo establecido en el ordenamiento jurídico, porque son 30 años más 15 años de medidas eliminativas”, indicó.
Lagos fue raptada y asesinada por su expareja, que, según el fiscal, impactó deliberadamente con su coche contra la barrera del peaje de Soca —en la ruta 8—, para matar a la mujer. El hombre, de 29 años, había ingresado a su casa, apuñaló a un amigo de ella que la acompañaba —por miedo a que él apareciera tras haberlo denunciado— y la raptó.
Según el artículo 92 del Código Penal, las medidas eliminativas se reservan para “delincuentes habituales” y a “violadores u homicidas que por la excepcional gravedad del hecho, derivada de la naturaleza de los móviles, de la forma de ejecución, de los antecedentes y demás circunstancias afines, denuncien una gran peligrosidad”.