La fiscal Diana Salvo había manifestado el 15 de febrero pasado su "preocupación" porque el joven apodado "Kiki", identificado como quien asesinó a Florencia Cabrera, no había sido detenido por la Policía en el marco de la causa que lo investigaba por el femicidio de su ex pareja en 2017.
A través de un comunicado, la Fiscalía General de la Nación consignó que Diana Salvo, que entendía en el femicidio, manifestó al fiscal de Corte adjunto Ariel Cancela su "preocupación" porque la Policía no hubiera podido detener a "Kiki" tras el femicidio. Según Fiscalía, Salvo "solicitó reiteradas órdenes de detención y allanamiento sin éxito en la captura del presunto responsable".
Cancela le indicó entonces a Salvo que se comunicara con el oficial del caso, encargado de organizar el trabajo policial.
El fiscal adjunto también pidió a Salvo que redactara un memorándum con los antecedentes del caso. El comunicado de Fiscalía consigna que ese documento no fue enviado a la Fiscalía de Corte.