El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, fue eximido este jueves por la retención de documentos clasificados, pero las conclusiones de la fiscalía suponen un duro golpe para él dado que subrayan la mala memoria del mandatario, quien busca la reelección a sus 81 años.
El Departamento de Justicia ha estado investigando a Biden desde que a finales de 2022 fueron hallados en su domicilio de Delaware y en una oficina privada una veintena de documentos clasificados de la época en la que fue vicepresidente de Barack Obama (2009-2017).
El caso recuerda al del expresidente Donald Trump (2017-2021), posible rival de Biden en las elecciones de noviembre, aunque este acabó imputado por haberse negado a devolver centenares de documentos que retenía en su mansión de Florida.
Los retuvo a sabiendas, pero no habrá cargos
Robert Hur, fiscal especial encargado del caso de Biden, publicó este jueves el informe de sus investigaciones en el que descarta recomendar cargos contra el mandatario, aunque concluye que el demócrata retuvo intencionadamente los documentos.
“Nuestra investigación encontró pruebas de que el presidente Biden retuvo y divulgó intencionadamente materiales clasificados después de su vicepresidencia cuando era un ciudadano privado”, relata el fiscal. Entre los documentos clasificados hay material relacionado con la política de Estados Unidos hacia Afganistán y anotaciones manuscritas de Biden sobre cuestiones de seguridad nacional y temas sensibles de inteligencia.
No obstante, Hur sostiene que las pruebas recabadas no son suficientes como para considerar al mandatario culpable de un delito.
La política del Departamento de Justicia establece que el jefe de Estado no puede ser acusado mientras esté en ejercicio, pero el fiscal afirma en su informe que habría llegado “a la misma conclusión” incluso si no existiera esta limitación.
Cuestión de memoria
Entre las casi 400 páginas de conclusiones de la investigación, lo que más revuelo ha causado son las varias referencias que Hur hace sobre la mala memoria del presidente.
El fiscal comenta que el presidente estadounidense demostró “una memoria significativamente limitada” en los interrogatorios y que su condición en 2023 había empeorado en comparación con grabaciones que se tenían de 2017. El mandatario, por ejemplo, no recordaba las fechas en las que ejerció como vicepresidente, habiendo olvidado tanto el año en el que comenzó como en el que concluyó ese cargo.
“No recordaba ni siquiera cuándo murió su hijo Beau”, fallecido de cáncer en 2015, relata el fiscal.
Según el informe, el presidente se mostró en los interrogatorios “como un anciano con buenas intenciones y mala memoria” y el fiscal especuló incluso con la dificultad de que pudiera ser procesado en un futuro.
“Sería difícil convencer a un jurado de que debe condenar a un expresidente de más de 80 años por un delito grave que requiere de un estado mental de voluntariedad”, relata.
Trump, parecido no es lo mismo
El informe también distingue la situación de Biden de la de Trump, sobre quien pesan 40 cargos penales por haberse negado a entregar centenares de documentos clasificados a los Archivos Nacionales, la institución que debe resguardar ese material.
Hur sostiene que hay “múltiples agravantes” sobre Trump, como el hecho de que “se le dieron varias oportunidades para devolver los documentos y evitar ser procesado”, pero se negó a hacerlo.
Además, según la acusación de la fiscalía, el magnate neoyorquino habría ordenado también la destrucción de pruebas para obstruir la justicia.
El FBI allanó en agosto de 2022 la mansión de Mar-a-Lago de Trump en Florida para recuperar dichos documentos, mientras que los de Biden fueron hallados en noviembre y diciembre de 2022 por los abogados del presidente y entregados a las autoridades.
Biden dice caso cerrado
Poco después de conocerse el informe, Biden publicó un comunicado en el que se mostró satisfecho por no haber sido imputado, pero no hizo mención alguna a las alusiones del fiscal sobre su memoria.
El jerarca defendió que “colaboró completamente” con los fiscales, no puso obstáculos y no buscó demoras en la investigación.
“Este tema está ahora cerrado”, declaró en un discurso posterior.
Los republicanos, en cambio, reprocharon al Departamento de Justicia estadounidense por “usar una doble vara de medir” con Trump y con Biden.
Para el presidente de la Cámara de Representantes, Mike Johnson, la decisión de Hur es “profundamente perturbadora”, mientras que —según el presidente del Comité de Vigilancia de ese hemiciclo, James Comer— los estadounidenses están “consternados” de que Biden viva “por encima de la ley”.
EFE