Cuando surgió el brote de coronavirus en Treinta y Tres, el Gobierno decidió suspender las clases presenciales en la educación allí, dejando a departamento por fuera de las fases previstas de reinicio de clases en el resto del país.
"La presencialidad educativa se suspende hasta el viernes 3 de julio, cuando vamos a hacer una evaluación", dijo entonces el presidente Luis Lacalle Pou.
Esta mañana, sin embargo, y ante la persistencia del brote en el departamento (donde están 69 de los 91 casos activos en el país), se decidió prolongar la suspensión de las clases hasta el 11 de julio.
El presidente del Codicen, Robert Silva, dijo en ronda de prensa que firmaría hoy la resolución, dado que el número de casos aumenta.
"Consultamos al MSP, al Poder Ejecutivo y vamos a suspender las clases hasta el próximo 11 de julio. Es una situación que nos importa mucho, Queremos volver a la presencialidad, pero lo número 1 es la salud y el cuidado de la población, nuestros estudiantes, sus familias, docentes y funcionarios. Eso es claro", dijo, según recogió Informativo Sarandí.