Ante una nueva suba del precio de los combustibles el pasado 1.° de febrero, entre otros actores, la Unión de Vendedores de Nafta del Uruguay (Unvenu) sostuvo que la resolución del Poder Ejecutivo afectaba tanto “a los estacioneros como a los ciudadanos”.
En diálogo con Tv Ciudad, el gerente general de Unvenu, Federico de Castro, expresó que para el caso de los estacioneros la suba del precio de la nafta y el gasoil también los perjudica por el impacto que “tiene en las tarjetas de crédito y débito que son un porcentaje del precio”.
“A medida que aumenta el combustible sube ese porcentaje (el arancel que reciben las tarjetas) y el comerciante cada vez gana menos. Por eso estamos solicitando una rebaja en el arancel y a la vez un cambio, para que en vez de ser un porcentaje como es actualmente, sea un fijo por transacción”, dijo el ejecutivo, que mencionó además que el reclamo viene de larga data.
En diciembre de 2021, los estacioneros de Maldonado amenazaron con no aceptar tarjetas de crédito para el pago de combustibles a partir del 20 de diciembre, pero finalmente se resolvió suspender la medida de reclamo.
Como ha ocurrido en la mayoría de los sectores de la economía nacional, desde 2017 el uso de la tarjeta de débito para el pago de combustibles en las estaciones de servicio se ha triplicado e implica más de US$ 5 millones anuales al año por concepto de pagos de aranceles, según surge de un trabajo realizado por Unvenu al que tuvo acceso Montevideo Portal.
En enero de 2017 el costo por las transacciones con débito para las estaciones de servicio fue de $ 8.447.683, mientras que en enero de 2021 este costo ascendió a $ 21.078.196, señala el informe de octubre de 2021.
Del análisis de Unvenu se desprende que actualmente en promedio el “37% del combustible comercializado por las estaciones de servicio se paga con tarjetas de crédito, débito y otros instrumentos electrónicos”.
Ese porcentaje
se divide en 12% para las tarjetas de crédito y 25% con las de débito y otros
instrumentos.
Según el trabajo, si se considera solo marzo de 2021, los pagos de combustible con instrumentos electrónicos fueron por $2.785.0700.767, sobre un total de ventas de $7.243.895.202.
En octubre de 2021 y sin considerar la última suba de combustibles, Unvenu consideró que “en lo que va del año los combustibles subieron 26%, lo que generó un incremento enorme por concepto de aranceles para las estaciones de servicio, sin que hubiese ninguna contraprestación adicional del sistema financiero que justifique un aumento de tal magnitud”.
“El incremento del precio de los combustibles significó que adicionalmente al aumento de participación del instrumento, el sistema financiero incrementara sus ingresos 26% por realizar el mismo servicio. La combinación de las situaciones antes mencionadas (aumento uso de débito y suba de combustibles) significa que en algunos caos el costo de aranceles será mayor a la ganancia que tiene el comerciante/empresario por su negocio, lo que es absurdo e inadmisible”, concluyó la gremial.
Para las tarjetas de crédito el arancel que pagan las estaciones de servicio por transacción es de 1,25% (más IVA) y para las de débito es 1,05% (más IVA). En el caso de las tarjetas emitidas en el exterior hay una comisión adicional que le cobran al comercio.