El miércoles la Cámara Penal Bonaerense revocó un fallo que negaba la expulsión de Mario Vitette, el uruguayo conocido por ser el cabecilla del llamado "Robo del Siglo", ocurrido en el 2006 en el Banco Río de Acasusso en Buenos Aires, cuando un grupo de cinco delincuentes se llevó alrededor de 19 millones de dólares ye scapó por un túnel.
En los próximos días Vitette deberá ser expulsado de Argentina por la Dirección Nacional de Migraciones. “Es la alegría más grande que he recibido este año”, afirmó Vitette en conversación con Montevideo Portal, desde la cárcel de Gral. Roca en la Provincia de Río Negro, a unos 1.100 kilómetros de Buenos Aires.
Vitette de casi 60 años, se comunica a diario con su familia y espera poder disfrutar un tiempo con ellos mientras realiza los trámites para su salida de Uruguay. La idea es sacar la ciudadanía italiana para acceder a la Unión Europea y radicarse probablemente en la ciudad suiza de Berna.
”Vuelvo a mi país de origen, después de muchísimos años en que no estoy. Tengo un 50% de gente que se ríe conmigo y un 50% que sufre con sólo escuchar mi nombre, pero es un paso obligado, tengo que renovar toda mi documentación, sacar mi doble nacionalidad, el pasaporte de la Unión Europea, mi permiso de conducir, tengo que hacer de todo”, afirmó.
Vitette no toma alcohol, ni drogas y tiene pensado instalarse en el campo de su padre a descansar, a decir de él a “reconfortar su cuerpo dolorido", revisar su "estética decadente", recomponer su "salud mental" y revivir su "sexualidad vigente”.
Le pidió a su hija que para recibirlo comprara un short, unas chancletas y una crema curativa “porque me van a salir callos en el ombligo de rascarme la panza debajo de un árbol en el campo de mi papá, donde hemos esparcidos sus cenizas. Voy a mirar y no lo voy a poder creer y me voy a reír y la señora jueza va a seguir durmiendo en su almohada pensando que retuvo a un triste delincuente. Ella es una señora profesional. No es que nos agarramos a trompadas entre iguales, es una señora jueza de la Nación que hizo valer su firma para tenerme un año más retenido porque yo le dije que no conocía la legislación vigente, que me tenía que expulsar y la señora se enojó. Ahora el superior le dijo que no conocía la legislación vigente, que Vitette tenía razón. Después de mucho sufrir, ahora me río yo”.
Siendo el responsable de la estrategia que siguieron los abogados para obtener su liberación, señaló que estudió la ley de migraciones y se hizo cargo del robo del Banco de Río, condición para poder acceder a la expulsión del país, al ser extranjero: “Cuando me veo perdido, como que no me voy a poder ir, encuentro la Ley Migratoria, la estudio, me hago declarar irregular, me hago cargo del ilícito, justifico las causas y me voy expulsado del país. Si no ahora no estaría suelto. No es más que conocimiento, buen diálogo con los abogados y ajustar a derecho mi idea, es un logro de los tres abogados que fueron los que negociaron”.
Mi dulce condena
Según la ley, cuando se ejecuta la expulsión el resto de la pena queda condonada: ”Yo debo 10 años acá, los que representan al Ministerio Público, como los fiscales, dicen ´mirá este hijo de mil puta, la estrategia que buscó y cómo la ejecutaron los abogados. Se nos va en libertad y todavía le tenemos que regalar 10 años, porque es la ley´".
Vitette manifestó que quiere utilizar su tiempo libre para ayudar a la reinserción social de las personas que salen en libertad. Sin embargo se mostró molesto con sátiras que aparecieron sobre el tema en los medios de comunicación: “Estuvieron haciendo sátiras de que yo iba enseñar a robar porque dije que me gustaría hacer acción social, hablar de mi mal ejemplo y de este saldo negativo, a los delincuentes juveniles, a los que están perdidos en el paco (pasta base), pero tuve muy mala crítica de medios informativos. Ellos quieren que me siente debajo de una palmera a tomar coco y caipirinha con dos minas semidesnudas; esa es la fantasía que ellos se hicieron del que robó el Banco de Río, que en realidad no robó nada”.
En ese sentido, subrayó que tanto en Argentina como en Uruguay falla el proceso de recuperación y reinserción social, facilitando la reincidencia: “Nadie se encarga del detenido, los eyectan, le dan una patada en la cola. Los pibitos que salen de acá los ponen en un colectivo con cinco mil pesos uruguayos y cuando se bajan están en la capital donde todos tienen un reloj tal, un IPOD, el último Blackberry. Ese pibito sale y hace un desastre. En Uruguay, los pobres taxistas están atrincherados por la ola de inseguridad. ¿Ustedes creen que esos chicos que le pegan a un señor mayor que lo desfiguran y lo rompen todo para comprar un paquito son ladrones? Yo soy un ladrón. A mí denme 25 años de cárcel, enciérrenme y tiren la llave pero preocúpense por esos pibitos. A ellos se les cruza por la vida la necesidad y no saben como sortearla. ¿Por qué no vamos a una ONG a decirles que esto es una basura, que no sirve, que el balance es negativo, que salís dos días en la televisión pero estás 40 años preso, que mis hijos me desconocen, que soy un padre ausente, que he malgastado mi vida?”.
El proceso judicial
Vitette reclamaba su expulsión del país en cumplimiento de la Ley Migratoria, ya que cumplió la mitad de su pena. Vitette, que es de nacionalidad uruguaya, fue detenido en 2006 por el asalto al banco Río, y excarcelado luego con un régimen de semi-libertad, pero después volvió a prisión por otro asalto a un edificio en el barrio de Palermo, cometido en 2009, mientras gozaba de ese régimen. Pero ya contaba con antecedentes: antes, en 1999, había pasado una temporada preso por un robo tipo "hombre araña".
En el juicio abreviado al que se lo sometió se sumaron una condena de 10 años de cárcel por el primer robo, 3 años por el último, 14 años por el del Banco Río y seis meses por una estafa, lo que daba 27 años y 6 meses, que se terminó acordando en 21 años y seis meses. La mitad de ese tiempo es la que Vitette llevaba preso al momento del acuerdo, lo cual permite que sea expulsado, ya que los 11 años de prisión, según los cómputos, se cumplieron el 16 de setiembre del año pasado.
¿Por qué puede ser deportado a Uruguay Vitette? Porque la Ley Nacional de Migraciones dice que los extranjeros detenidos en el país deben ser expulsados en la mitad de sus condenas, la que ya se ha cumplido. El propio Vitette había explicado a Perfil: "La ley se votó en 2004 y se promulgó en 2005, firmada por Daniel Scioli. Era para expulsar a las mulas, que caían con un kilo (de droga) y debían pasar cinco años. Al Estado le cuestan U$S 200 diarios cada uno, y como cuando cumplen la condena se van del país, decidieron expulsarlos. Lo que no se dieron cuenta es que el mayor ladrón manifiesto también es extranjero", dice Vitette.
El "Robo del Siglo" ocurrió el 13 de enero de 2006, cuando cinco ladrones coparon el Banco Río de Acassuso, tomaron 23 rehenes y mientras negociaban con la policía, saquearon 143 cajas de seguridad, obtuvieron un botín de 19 millones de dólares en joyas y efectivo y huyeron por un túnel que construyeron durante meses y los comunicaba con los desagües pluviales subterráneos.