Max, nos encontramos días atrás en la casa del Partido Colorado en Martínez Trueba, para resumir tu período como secretario general, que acaba de culminar este lunes... y en el ínterin, antes de publicar esta entrevista, tuvimos que actualizarla, debido a la renuncia de Pedro Bordaberry al Ejecutivo del Partido. ¿Qué opinión te merece esta decisión que él ha tomado?
Creo que no va a cambiar ni la orientación del CEN, ni el compromiso de Bordaberry para con el Partido. Él sigue liderando el sector mayoritario del Partido, tendrá protagonismo como senador, e incluso en su carácter de tal podrá participar aunque sin voto de las reuniones del CEN, que considere oportuno.
¿Te pareció una decisión oportuna por parte de Pedro?
Creo que es una decisión muy personal, que como tal, hay que respetar. Ya en el pasado, la historia partidaria, muestra muchas ocasiones en que los líderes sectoriales del Partido no integraban el CEN.
¿Qué pasará ahora con el partido?
Como te dije, el Partido deberá abocarse al análisis de la coyuntura actual y de lo actuado en los últimos tiempos, encarar las elecciones departamentales de mayo e iniciar el camino a las futuras instancias, con mucho trabajo y dedicación, oyendo mucho a la gente, dando participación a las nuevas generaciones.
TERMINANDO UN CICLO... EN UN PARTIDO CON PROBLEMAS
Max, en lo personal estás terminando un ciclo dentro del partido...
Así es. Dejo el cargo de secretario general del Partido Colorado (PC) en este proceso que fuimos adoptando en los últimos años de rotar la secretaría general. Al final yo fui el que estuvo más tiempo, estuve casi 19 meses. Como era el tramo final no parecía razonable en medio de todo el proceso electoral estar rotando y demás, así que yo me quedé hasta el final del período. Fueron meses bastantes fuertes, de mucho trabajo, de un clima especial porque el tema electoral siempre va atrapando todo y se va instalando. Pero bueno, la verdad que para mí fue una experiencia muy importante y una gran satisfacción.
¿Y cómo se combina la satisfacción por haber tenido un cargo como secretario general de tu partido, con la gran decepción que embarga hoy al mismo?
Evidentemente estuvimos lejos de las expectativas que teníamos, esas cosas se explican por muchas causas, nunca hay una sola. Creo que ahora el partido lo que va a tener que hacer es un análisis profundo de la situación, de las causas, de la forma en que se encaró, el reconocimiento de los errores, y seguir hacia adelante.
¿Cómo se sigue hacia adelante cuando un partido que fue gobierno tantos años de la historia nacional, ahora no tiene motivo ninguno para pensar que tenga perspectivas de volver pronto?
No hay otra solución a estos temas que trabajar mucho y analizar mucho, porque uno puede tener la mejor propuesta, pero si comete errores en la comunicación o si está adentro de una coyuntura que no se maneja debidamente entonces terminan pasando muchas cosas. Yo sigo pensando que nuestra propuesta fue buena... quizás no se la supo comunicar bien.
¿Qué opinión te merecen algunos fenómenos que vimos en el PC, por ejemplo lo de Fernando Amado? Algo así como "me quedo pero...".
La interna del partido... Creo que le va a ir mejor al Partido si surgen muchos Fernando Amado que estén dispuestos a seguir marcando su camino. Esa fue un poco la historia del PC tradicionalmente. Siempre había una serie de vertientes, había discusiones, pero eso hacía fuerte al PC. Así que me parece perfecto que se genere Fernando Amado y que se generen otros que quieran empezar a marcar su camino dentro del partido. A mí eso no sólo no me tiene sin cuidado, sino que me parece positivo. Por supuesto, cada uno tendrá su estilo, habrá estilos que nos gustarán más y otros que nos gustarán menos, pero que aparezcan dirigentes dispuestos a marcar su camino me parece excelente.
BATLLISMO Y FRENTE AMPLIO
¿Qué te parece lo que alegan algunos de que el batllismo está hoy instalado en el Frente Amplio?
Sobre el batllismo y el FA yo soy muy tajante: para mí es un error muy grande pensar que el batllismo en su conformación e ideario está instalado dentro del FA. Lo que hace el FA no es batllismo.
¿Cuál es la diferencia?
En primer término, lo que ha hecho el FA particularmente en el último gobierno se parece más al peronismo que al batllismo. Porque el batllismo no iba atrás de la búsqueda del emparejo hacia abajo para que sean todos iguales. El batllismo lo que hacía era buscar la generación de oportunidades para levantar a todos hacia arriba. No creo que lo que propugna el FA sea batllismo, aparte que en el batllismo la parte del Estado de derecho y la libertad son elementos innegociables. Justo estos días redacté unas líneas de despedida a mi cargo que difundí en la página del partido y ahí decía que el batllismo en el PC ha sido el escudo de los débiles, de la defensa del Estado de derecho, de las libertades. Creo que la República necesita mucho PC todavía. Capaz que ahora alguna gente no lo advierte.
Dentro del FA hay de todo, hay algunos componentes que han estado opuestos radicalmente al batllismo. El comunismo y el socialismo no congeniaron con el batllismo durante toda su historia. Creo que algunos hacen una simplificación de los conceptos, y otros hacen una picardía, porque de alguna manera el batllismo está instalado en la sociedad, es una etiqueta que todo el mundo la quiere tener. Como también decía en las líneas que publiqué: "Pese a quién le pese, el custodio del ideal batllista es el PC".
TABARÉ PRESIDENTE
Max, como ciudadano, más allá de la decepción como colorado ¿cómo te sentís sabiendo que el doctor Vázquez va a ser nuevamente presidente?
Todos los gobiernos tienen sus cosas buenas y sus cosas malas. Yo respeto a todos por igual. Los únicos a los que no respeto es a los delincuentes. A los demás, aunque piensen distinto que uno hay que respetarlos siempre.
Más allá de eso, ¿estás preocupado?
Creo que en la medida en que todos ejercitemos la vida democrática razonablemente no tenemos que preocuparnos, nos gustará más o menos, y cada uno seguirá haciendo sus esfuerzos para instalar sus ideas y sus posiciones. Al doctor Vázquez ya lo vimos actuar, creo que ha tenido cosas buenas y cosas malas. No es el estilo que a mí más me gusta, no defiende las ideas que más me gustan, pero lo respeto, es el presidente de la República dos veces electo, ha pasado pocas veces en la historia del país, así que en la democracia no hay que cuestionarse estas cosas, hay que respetarlas.
No iba a la posición soberana del pueblo sino al hecho de que él con su estilo, con sus ideas, con su propuesta, va a ser quien rija el destino de los orientales.
Yo te soy franco, de acuerdo a la experiencia que hemos tenido de su primer mandato, él asumió prometiendo muchas reformas y efectivamente hubo poca cosa. Su mayor mérito, en mi criterio, fue poner un equipo que lleve adelante la macroeconomía dentro de los lineamientos que más o menos cada vez más todos estamos acordando, porque van pasando los partidos y se advierte que hay ciertos criterios en la macroeconomía en los que todos asumimos que hay que ir por ese lado. Por lo menos la mayoría de la gente, por más que en el período pasado, que siguieron también en esa línea, los bombardearan desde el propio FA, mientras en la oposición decíamos que había que hacer eso. Volviendo al doctor Vázquez, yo creo que ése fue su gran mérito.
Ahora, prometió la reforma del Estado y no pasó nada, generó una reforma en la educación que estuvo muy lejos de ser efectiva, y el tema de la educación creo que pasa a ser uno de las más grandes preocupaciones que tenemos todos.
En su gobierno se empezó a deteriorar el clima de seguridad en Uruguay, tuvo en su primer mandato algunos ministros del Interior que me parece que erraron la política y fueron también los que de alguna manera deterioraron el tema seguridad. Yo siempre abro una carta de crédito, pero la experiencia anterior no es de mi entera satisfacción, veremos qué pasa ahora.
Mencionaste los temas más problemáticos, pero hubo también logros: el tema de la inclusión, la lucha contra la pobreza y la indigencia, ¿no te parece que merecen elogios?
Por supuesto. Creo que fueron instalados a caballo de una política asistencialista a la que a veces es necesario recurrir pero tengo algunas dudas de si realmente esos logros son sustentables en otras situaciones. Tenemos 10 años de crecimiento pero estos períodos económicos no siempre se mantienen. Si vamos a solventar la inclusión, la baja de la pobreza y demás sólo con políticas asistencialistas el futuro peligra también. Yo reconozco esos logros, también el muy mentado viento de cola que han tenido estos 10 años ha colaborado, pero no siempre tenemos viento de cola.
De todas maneras, creo que los criterios generales sobre la macroeconomía me parecen ser razonables y de alguna manera yo siento también, por más que mucha gente se dedica a reescribir la historia, que nosotros fuimos partícipes -y me tocó estar allí- del punto de inflexión que pasó de la crisis a la época de prosperidad. Por supuesto que nosotros no recogimos los frutos de ello, pero las medidas que se tomaron en la crisis del 2001 fueron las que de alguna manera permitieron el período que siguió. Si no se hubieran tomado no sé qué hubiera pasado. Algunas de esas medidas que se tomaron fueron atacadas en su momento por el doctor Vázquez. Lo que pasa es que los tiempos pasan y muchas veces hay gente que va reescribiendo la historia, pero la historia está en los diarios.
¿Qué opinión te merece el gabinete que formó el doctor Vázquez?
En mi criterio el doctor Vázquez hizo una brillante jugada política, sin lugar a dudas, más que nada dirigida hacia el interior del FA. Se plantó en su posición, dio la señal clara de que él mandaba. En el gabinete creo que puede haber gente que puede rendir bien en esos cargos y hay gente que no me parece tan apropiada. De hecho, durante nuestra campaña, planteamos nuestra preocupación sobre el tema de la seguridad, sobre el Ministerio del Interior, y lamentablemente el doctor Vázquez optó por mantener las autoridades de ese ministerio que para nosotros notoriamente han fracasado en los últimos años.
Creo que por otro lado hay algunos ministros que pueden desarrollar una buena tarea, por ejemplo: fue una buena opción lo que tomó con respecto a la Cancillería porque justamente en los últimos cinco años la política exterior del país, que siempre fue una política de Estado, se había venido deteriorando sensiblemente a caballo de un concepto ideologizado ajeno a lo que fue tradicionalmente la política del país. Y creo que el futuro canciller puede cambiar un poco esos criterios. Pero bueno, habrá que ver cómo actúa. Como te decía, abrámosle una carta de crédito a todos.
Más allá de las preferencias políticas de cada uno, ¿concordás con quienes dicen "Uruguay está hoy mucho mejor que hace 10 años"?
Uruguay hace 10 años estaba en medio de una crisis, por lo tanto seguro que está mejor. El problema es dónde están las responsabilidades de cada uno para estar mejor. No tengo duda, yo lo viví muy de cerca, estábamos realmente muy mal dentro de la crisis. Por suerte creo que estaba el PC para tomar las decisiones adecuadas, porque si hubiera estado el doctor Vázquez hoy en día probablemente estábamos como Argentina.
Es una frase muy fuerte la que acabás de decir.
Y bueno... en marzo de 2003, cuando estábamos en pleno proceso del canje de deuda, que fue en mi criterio el punto de inflexión del éxito para empezar a crecer -y desde ese entonces hemos crecido ininterrumpidamente-, el doctor Vázquez salió por la radio a decir que había que entrar en default. Había otra gente que no pensaba lo mismo, el contador Danilo Astori estaba de acuerdo en lo que se estaba haciendo, pero el doctor Vázquez salió a pedir el default. Si era por un tema de conveniencia electoral eso lo determinará él, pero lo tengo muy presente, yo era subsecretario de Economía y tengo esa audición de radio en El Espectador con Emiliano Cotelo que me quedó siempre grabada, porque nosotros estábamos viviendo muy fuertemente eso. En un momento en el que Uruguay necesitaba imponer la mayor credibilidad posible, porque lo que estábamos haciendo era pedirle al mercado que creyera en nosotros, el doctor Vázquez dijo que había que entrar en default. Un poco la línea de lo que nos planteaba en aquel momento el Fondo Monetario Internacional (FMI). El FA tiene una larga tradición de poner carteles y pancartas que dicen "No al FMI", ya no lo usan, pero las usó mucho, pero el único gobierno que le dijo no al FMI fue el nuestro, entre 2000 y 2005. El FMI dijo: "Hay que ir por esta línea", y nosotros dijimos: "No, nosotros nos vamos por esta línea porque para nosotros uno de los mayores patrimonios de Uruguay es, justamente, la credibilidad y las certezas que le da a la gente, entonces no vamos a entrar por ahí".
UNA NUEVA ETAPA... SIEMPRE DENTRO DEL PARTIDO
¿En lo personal cuál va a ser tu actuación de ahora en más?
Voy a seguir en partido. Vamos a ver un poco dónde nos vamos acomodando. Ahora esperando el verano para aflojar un poco la tensión, pero creo que siempre hay mucho para hacer y después de vivir -yo lo decía estos días- 30 años de militancia del PC... En distintas posiciones, a veces como un universitario que hacía gremialismo en la universidad y hasta terminar como secretario general, ocupé cargos en el gobierno y demás, así que... yo no me puedo quedar mucho tiempo en casa.