El Congreso argentino inició este miércoles el debate sobre la Ley de Bases y Puntos de Partida para la Libertad de los Argentinos, conocida como 'ley ómnibus', proyecto estrella del Ejecutivo de Javier Milei, con el que busca implementar una serie de profundas reformas económicas en el país.
Tras un mes de deliberaciones en las comisiones parlamentarias y de reuniones entre el oficialismo y bloques de la oposición dispuestos a acompañar el proyecto, a las 10:29 hora local de este miércoles dio comienzo en la Cámara de Diputados una sesión que se prevé muy larga y agitada, en medio de protestas de organizaciones sociales en la Plaza del Congreso.
Este debate supone un momento clave para el Gobierno del economista libertario, ya que esta 'ley ómnibus' -denominada así por su cantidad de artículos y la amplitud de las reformas que incluye- es la espina dorsal de las políticas que busca implementar en Argentina para sacar al país de su, como suele denominarla el Ejecutivo, “decadencia” actual.
Con un 211,4 % de inflación anual, la más alta en todo el mundo en 2023, más de un 40 % de población en situación de pobreza y escasez de reservas en el Banco Central, Milei busca con esta ley que su Gobierno pueda disponer de facultades legislativas por, al menos, un año para acometer reformas sin necesidad de pasar por el Congreso.
Sin duda, la delegación de facultades es uno de los escollos para que este proyecto de ley salga adelante. De hecho, fue reduciéndose, durante la discusión en comisiones, y así, del texto inicial que contemplaba dos años prorrogables a cuatro, pasó a uno prorrogable a dos.
El proyecto, que inicialmente tenía 664 artículos, llega al pleno con 386, casi 300 menos, por las citadas conversaciones y tras la decisión del Ejecutivo de retirar el capítulo fiscal de reformas, uno de los más resistidos dentro de la iniciativa, fundamentalmente en la discusión con los gobernadores de las provincias.
En principio, La Libertad Avanza, fuerza de ultraderecha de Milei y con un ínfimo peso parlamentario, confía en el apoyo de aliados y sectores de oposición para sacar adelante el proyecto de ley, aunque es probable que no validen ciertos artículos que son eje de controversia, como la delegación de facultades que abarca un amplio abanico de materias, desde lo económico hasta lo penal.
Como marco de la sesión, a las puertas del Congreso ya hay concentradas organizaciones sociales y sindicales, que irán en aumento durante la jornada e, incluso, podrían hacer vigilia si la sesión, como se espera, se alarga durante la noche; todas ellas en rechazo de la amplia reforma que busca desregular la economía y reducir al mínimo la presencia del Estado.
El portavoz del Gobierno, Manuel Adorni, se refirió este miércoles en su conferencia de prensa diaria a estas protestas y llamó a “evitar cualquier tipo de desorden” y a “olvidar otros tiempos donde la violencia quedó en la mente de todos los argentinos”.
“Hay un vallado de seguridad”, dijo Adorni en referencia a las vallas con las que amaneció rodeada la sede del Congreso en Buenos Aires.
Si logra el visto bueno en la Cámara de Diputados, el proyecto pasará a su tratamiento en el Senado, cuyos miembros representan a las provincias —ninguna de ellas gobernada por los libertarios—.
EFE