Luego de conocidos los escrutinios primarios de la Corte Electoral, que le dio mayoría parlamentaria al Frente Amplio (FA) en el Senado, pero no en Diputados, desde la dirigencia de la coalición de izquierda ya piensan en el balotaje del último domingo de noviembre y también en la necesidad de negociar en caso de volver al poder.
Así como ocurrió en el búnker del FA a medida que se fueron conociendo los resultados, los principales dirigentes frenteamplistas analizaban la posibilidad de tener que negociar con el reciente electo diputado Gustavo Salle. Su partido Identidad Soberana, según el escrutinio primario, cosechó más de 64.000 votos y tendrá dos bancas en la Cámara baja.
En esta línea, el presidente del FA, Fernando Pereira, reconoció que con “Salle habrá que hablar”.
“Él querrá o no; por momentos tiene posiciones muy duras, pero calculo que al ingresar al Parlamento tendrá que hablar. Si decide no hablar, hay otros partidos con los que vamos a negociar. No espero nada. Pero un país democrático no podemos vivir insultándonos, ¿no? Parto de la base de que pudo haber sido una estrategia electoral, pero que luego de estar en el Parlamento se requieren determinadas responsabilidades”, valoró Pereira.