En el marco del 50 aniversario del golpe de Estado dado por Juan María Bordaberry y las Fuerzas Armadas, fueron varios actores políticos y sociales que se refirieron al histórico episodio que instauró una dictadura que duró 12 años en Uruguay.
Además de las diversas reivindicaciones a la democracia en mensajes en general, también varios usuarios y políticos en redes destacaron la figura de Mario Amaral, el único intendente que renunció de forma inmediata una vez concretado el golpe de Estado el 27 de junio de 1973.
El gesto de Amaral fue recordado tanto por el actual intendente de Rocha, Alejo Umpiérrez (Partido Nacional), como por el exintendente frenteamplista Aníbal Pereyra.
“Hoy también es homenaje a don Mario: el único intendente de la República que renunció el día del golpe de Estado. Gracias por tu legado democrático. No te fallaremos”, escribió Umpiérrez.
Por su parte, Pereyra expresó: “El 27 de junio de 1973, Uruguay amaneció con un golpe de Estado cívico-militar. La respuesta del pueblo fue inmediata, se ocuparon las fábricas, los centros de estudio y un solo intendente renunció: Mario Amaral. Pasaron muchos años para prestigiar su acción”.
En 2016, el gobierno de Rocha durante la gestión de Pereyra nominó la plaza del barrio Progreso de la capital departamental “Mario Amaral”, a raíz de una iniciativa del exedil del Movimiento de Participación Popular (MPP) Mauro Mego.
“Mario Amaral, hombre perteneciente al Partido Nacional, se destacó por ser el único de los 19 intendentes en renunciar al cargo el 27 de junio de 1973 cuando se instaura el golpe de Estado cívico-militar. Diez años antes de este hecho, asumía como presidente del Concejo Departamental de Gobierno, desempeñándose en el cargo desde 1963 hasta 1967 (los Concejos Departamentales tenían ciclos de 4 años)”, se consigna en la web de la Intendencia de Rocha.
Cercano a los fundadores del Movimiento Nacional de Rocha, Carlos Julio Pereyra y Javier Barrios Amorín, Amaral resultó electo en las elecciones departamentales de 1971.
“El 27 de junio de 1973, día en que sesionaría la Junta Departamental de Rocha, se concreta el golpe de Estado en Uruguay. Un cordón militar impidió el acceso de los ediles a la Junta. El intendente resolvió, pocos minutos después de conocerse la noticia de la caída de la democracia, renunciar al cargo. Esa decisión fue seguida por otros cargos de confianza designados por este. Con la misma fecha del golpe renunció al cargo de asesor letrado Mario Anza Vigliola. También renunció el maestro Julio María Sosa y Franklin Moreira”, se recuerda en la web de la Intendencia de Rocha.