El presidente Luis Lacalle Pou encabezó este lunes la inauguración de una escuela agraria de UTU en la localidad de Carlos Reyles, en Durazno.
Según informó UTU, la iniciativa fue desarrollada por el organismo “en conjunto con la Fundación DAT [Disciplinas Aplicadas al Trabajo], que tiene por objetivo aportar al desarrollo de los jóvenes rurales, asegurarles el acceso a la enseñanza media y la formación en valores”.
El exsenador colorado Pedro Bordaberry es uno de los referentes de la Fundación DAT, y este lunes también participó del acto de inauguración.
En su discurso, Lacalle Pou hizo varias menciones a Bordaberry. Primero contó que el 31 de enero recibió de parte del exsenador la invitación para participar del acto de inauguración. Y dijo que, este fin de semana, Bordaberry le escribió para recordarle la invitación, y contarle más detalles del proyecto.
“Me contó cómo venía la cosa, me contó cuántos chiquilines son del pago, cuántos vienen a dormir... Y como que el proyecto, que al principio es una idea, uno lo va aterrizando en un chiquilín. Esa vieja frase de ‘cosas chicas para el mundo, cosas grandes para mí’ yo creo que tiene —por lo menos desde el punto de vista del gobernante— un defecto. Porque el gobernante debe atender de a uno. Y esa es la gran complejidad de la actividad de gobierno. Si hablás de cifras, de porcentajes, pero nunca les ponés cara, nunca les ponés corazón, una tristeza, una alegría, es que no estás entendiendo nada”, dijo el presidente.
A continuación, pidió “pensar” en cada uno de los 21 alumnos de la escuela agraria.
De inmediato, volvió a referirse a Bordaberry, al que le elogió haber evocado en su discurso “la generosidad” y el pensar en sentido de comunidad, donde “todos somos uno”.
En su discurso, Lacalle Pou también hizo mención a la cooperación entre el sector público y los privados, algo a lo que también se había referido Bordaberry.
Consultado por Montevideo Portal, Bordaberry destacó la iniciativa por “solucionar” un problema específico que había en esa localidad, y señaló la cooperación entre la fundación y la UTU en busca de lograr ese objetivo.
Lacalle Pou además hizo mención a los avances tecnológicos y dijo que el gran desafío para los estudiantes de este tipo de centros, hoy en día, es “afincarse en el pago y trabajar para el mundo”.
Al momento del corte de cinta, Lacalle Pou entregó primero un trozo al director general de UTU, Juan Pereyra, y en segundo lugar le dio otro a Bordaberry.