Contenido creado por Federico Pereira
Internacionales

Pelo a pelo, la peluca

El “megadecreto urgente” de Milei peligra por la falta de apoyo en el Congreso

La norma, de carácter especial, solo puede ser aprobada o rechazada por entero en las cámaras, donde no le dan los votos al oficialismo.

22.12.2023 10:23

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2023-12-22T10:23:00-03:00
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Sumado a la resistencia de varias organizaciones sociales y de trabajadores, los partidos políticos y figuras de la oposición argentina han manifestado su descontento y rechazo contra el decreto necesario y urgente (DNU) firmado por Javier Milei, que tendrá el desafío de conseguir su aprobación en el Congreso, donde el oficialismo no tiene los votos suficientes.

El “megadecreto” de más de 366 artículos que apunta a desregularizar la economía toma rumbo de colisión a medida que se genera, en las últimas horas, un bloque parlamentario que lograría los votos necesarios para anularlo.

El proceso

El DNU, por su carácter de normativa especial, debe ser presentado en un plazo de 10 días desde su firma en la Comisión Bicameral Permanente de Trámite Legislativo del Congreso; una vez allí, esta tiene 10 días hábiles para emitir dictamen sobre su validez, para luego enviarlo al plenario, según informa Chequeado.

Si la comisión no se expide en ese plazo, las dos cámaras del Congreso deberán tratar de oficio el DNU, donde tanto el oficialismo como la oposición tienen el gran desafío: tanto el Senado como la Cámara de Diputados solo pueden aceptar o rechazar el decreto, no pueden introducir enmiendas, modificaciones o agregados al texto; o se aprueba íntegro o cae así como viene del Poder Ejecutivo.

Para que el decreto sea aprobado o rechazado, la opción mayoritaria ganará por la mayoría absoluta de los legisladores presentes en cada cámara, es decir, la mitad más uno.  

Por las características del DNU y su lugar en la legislación argentina, si ninguna de las cámaras lo trata, el decreto quedará vigente. En caso de que una lo acepte y otra lo rechace, también queda vigente tal cual lo firmó Milei.

Solo puede perder su vigencia en caso de que sea rechazado por las mayorías de ambas cámaras.

Las reacciones

La medida firmada por Milei fue inmediatamente rechazada por los sectores peronistas, entre ellos, la principal coalición opositora, Unión por la Patria. Según Infobae, también fue rápidamente rechazada con dureza por parte de la izquierda —el Frente de Izquierda y de Trabajadores y otros partidos de corte trotskista— y por la Coalición Cívica, que lidera Elisa Carrió.

Luego surgieron críticos a la norma desde el radicalismo y de diversos partidos provinciales. En el caso de la Unión Cívica Radical, liderada hace una semana por el senador Martín Lousteau, su Mesa Nacional pidió a Milei que convoque a sesiones extraordinarias del Congreso para que se pueda tratar la reforma que propone, pero no bajo la metodología de un DNU, sino como proyectos de ley.

“Por la vía del DNU resulta imposible hacer este trabajo, porque solo se puede aprobar o rechazar en su totalidad. Y en el contenido hay cuestiones positivas, pero también otras muy preocupantes”, indica el comunicado de los radicales, que agregaron: “El Poder Ejecutivo está a tiempo de enmendar su error enviando un proyecto de ley espejo que pueda debatirse en el Congreso de la Nación, recuperando así el camino de la normalidad, la construcción de la confianza política, los consensos y el diálogo parlamentario”.

Lousteau agregó, desde su cuenta personal, que se trata de un DNU “de una amplitud y longitud inédita” y que si bien está de acuerdo en que se deben “cambiar muchas cosas en Argentina, entre ellas el improductivo desempeño de partes del Estado y las regulaciones que traban el buen funcionamiento de diversos sectores”, con el método elegido por Milei “en cuatro años podría venir otro presidente y mediante otro mega DNU hacer exactamente lo contrario”.

“Este DNU tiene 82 páginas con 366 artículos que derogan y modifican un sinnúmero de leyes y decretos. En el contenido del Mega DNU hay algunas iniciativas que pueden ser interesantes y otras irrelevantes para la agenda urgente. Otras pueden juzgarse como buenas, malas o realmente muy malas para las urgencias de la sociedad. Cada una de ellas merece un análisis riguroso e individual y para eso está el Congreso”, dijo el flamante presidente de la UCR.

Infobae consigna que Maximiliano Ferraro, presidente de la Coalición Cívica —socio de la UCR en lo que queda de Juntos por el Cambio— dijo que “el momento histórico” que vive el país “no da licencia para el vale todo y un pragmatismo desmedido”, aunque sostuvo que algunos de esos cambios podrían ser respaldados por su partido si se tratasen de la forma correcta.

Miguel Ángel Pichetto, que preside el bloque Cambio Federal, dijo que lamenta que Milei gobierne “contra el Congreso”, y ratificó que lo que plantea el presidente debe de ser tratado “por ley”.

Por su parte, Horacio Rodríguez Larreta, que lidera el bloque moderado de Propuesta Republicana (PRO) y acrecienta su distancia con los dirigidos por Mauricio Macri y Patricia Bullrich —aliados de Milei—, sostuvo: “La Argentina necesita reformas, pero no por decreto. El instrumento para que esto suceda es una ley del Congreso. Tenemos que evitar que en 4 años otro presidente, con un DNU similar, pueda dar todo marcha atrás. La división de poderes es la pieza central de nuestra República”.

“La Argentina necesita reformas profundas, lo dije muchas veces durante la campaña, y sigo pensando lo mismo. Pero solamente van a tener éxito si se pueden sostener en el tiempo y si tienen solidez jurídica y constitucional que garantice su concreción. Para esto, las transformaciones deben ser resultado de un amplio consenso basado en el diálogo”, agregó el ex jefe de Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires.

Desde el peronismo, la expresidenta Cristina Fernández (2007-2015) dijo: “Hay que leer la Constitución completa, no hay que enfrentar a argentinos con argentinos”.

“Cuando la democracia [en Argentina] está cumpliendo cuarenta años de continuidad, nuestro país asiste a un hecho de extrema gravedad institucional jamás visto. El Poder Ejecutivo, en un acto de claro abuso de poder, ha avanzado sobre las atribuciones exclusivas del Poder Legislativo”, expresó en Twitter el también expresidente Alberto Fernández (2019-2023).

“Desde su asunción, el presidente y su ministro de Economía [Luis Caputo] han repetido datos falsos tratando de montar un escenario de caos para justificar la destrucción del Estado y de los derechos de los trabajadores”, agregó quien entregó la banda presidencial a Milei.

Desde el PRO, otro de los que se expresó al respecto fue el expresidente Mauricio Macri (2015-2019), aliado político de Milei. “En este momento tan frágil y amenazante, tenemos que ser conscientes de la urgencia de tomar medidas valientes. De no hacerlo, nos exponemos al riesgo de una hiperinflación que podría resultar devastadora para la vida de millones de argentinos”, advirtió Macri.

Los votos

En la órbita de la Cámara de Diputados (que tiene 257 miembros), La Libertad Avanza, coalición dirigida por Milei, cuenta con 38 escaños propios y dos de Buenos Aires Libre, a los que se sumarían para impulsar la aprobación los 37 diputados del PRO que lidera el macrista Cristian Ritondo. Sin embargo, esta ecuación no le da las mayorías.

Unión por la Patria tiene 102 diputados, que junto a los 5 del FIT, si se logra un acuerdo parlamentario con los grupos opositores que conformaban Juntos por el Cambio —la UCR con 34 bancas, la Coalición Cívica con 6 y Cambio Federal con 9—, lograrían la mayoría, incluso sin contar a las fuerzas provinciales que se les sumen.

La Cámara alta es aún más complicada para Milei, donde cuenta con 7 senadores propios y 6 del PRO. Allí, solo con que Unión por la Patria y la UCR, con 31 y 13 escaños respectivamente, decidan rechazar el decreto, lograrían la mayoría. A ellos se podrían sumar más senadores en contra del DNU que impulsa Milei.