El grupo Estado Islámico (EI) reivindicó este sábado el sangriento ataque cerca de una mezquita sunita de Kabul que dejó al menos 10 muertos y varios heridos.
"Los soldados del califato detonaron un aparato explosivo colocado cerca de un autobús en el sector 6 de Kabul", anunció el grupo en un mensaje divulgado en su cuenta de Telegram.
El grupo dijo que el ataque mató a 10 personas, la misma cifra anunciada por el Ministerio afgano del Interior. Además, la policía de Kabul indicó que otras 30 personas resultaron heridas.
Autoridades afganas señalaron que el ataque pareció dirigido a la comunidad minoritaria sufí que realizaba sus rituales antes de concluir las oraciones del viernes, informó AFP.
Imágenes espeluznantes de la explosión del viernes subidas en redes sociales mostraron a los sobrevivientes corriendo de la mezquita, algunos cargando víctimas, incluyendo niños.
Un portavoz del secretario general de la ONU, Antonio Guterres, emitió el sábado un comunicado en el cual condena el ataque.
Basado en AFP