Antes de que la Mesa Política de Cabildo Abierto se reuniera el pasado lunes sobre la tarde, el líder y senador de Cabildo Abierto, Guido Manini Ríos, hizo algunas consultas a los dirigentes del interior del país para saber cómo veían la situación.
Manini Ríos tenía por delante un dilema: se quedaba en la coalición de Gobierno o se iba y rompía con la gobernabilidad de los liderados por el presidente Luis Lacalle Pou. El legislador llegó al Anexo del Palacio Legislativo acompañado por la exministra de Vivienda Irene Moreira y ambos se fueron de allí sobre las 18:00 horas hacia la sede céntrica que posee el partido.
El senador Guillermo Domenech y el diputado Rodrigo Albernaz fueron los que se mostraron a favor de irse de la coalición. Domenech fue el más insistente con la posibilidad de abandonar el grupo de Gobierno e incluso adelantó que, si eso pasaba, estaba dispuesto a renunciar a su banca en la Cámara alta.
Albernaz, en tanto, fue en el mismo sentido y explicó que para su entender abandonar la coalición en este momento no sería tan perjudicial para el partido, dado que están transitando el final del período de Gobierno. Tanto el senador como el diputado argumentaron que el pedido de renuncia de Moreira fue “la gota que derramó el vaso”, pero en realidad hay una serie de hechos que vienen haciendo creer que los demás socios están dejando de lado las propuestas de Cabildo.
Esto último es lo que muchos cabildantes, y el propio Manini Ríos, han dicho públicamente. Una muestra de esto es la presión que han hecho para que se apruebe el proyecto de deudores, incluso el líder del partido aclaró que si esto no sucede, no descartan acudir al plebiscito.
Lo cierto es que la posición de Albernaz y Domenech, que ya habían adelantado a Manini Ríos, no permeó en el resto de la Mesa Política como para que la decisión ganadora fuera la de salir de la coalición. A la hora de que otros legisladores y dirigentes argumentaran, el foco estuvo en el “compromiso” asumido con los votantes.
Uno de los presentes dijo que el hecho de salir del grupo de Gobierno no solo implicaba dejar a “mucha gente sin trabajo”, sino desoír el voto de “miles de uruguayos” que apostaron por el partido. “La gente nos votó para que estuviéramos dentro de la coalición y sería faltar a nuestra palabra si nos vamos ahora”, agregó, según supo Montevideo Portal con fuentes del partido.
Horas de tranquilidad
Durante el fin de semana, Manini Ríos buscó pensar en frío y hablar con algunos cabildantes para escuchar diferentes visiones. Ni bien terminó las reuniones en el Parlamento el viernes, se fue hacia Rocha para cumplir con una actividad que ya tenía programada. Luego volvió a Montevideo y concurrió, el sábado por la tarde, a la beatificación de Jacinto Vera, en donde también estaba Lacalle, aunque no se cruzaron.
Cuando el presidente lo llamó el viernes por la mañana, el líder cabildante quería abandonar la coalición porque estaba, y aún lo hace, convencido de que Moreira no actuó por fuera de la ley, pese a que no presentaron en Torre Ejecutiva ningún respaldo jurídico para asignar la vivienda a la militante de Cabildo Abierto.
Con el pasar de las horas, ese enojo fue bajando y en la Mesa Política el senador se dedicó a escuchar las opiniones de sus correligionarios. Incluso la exministra de Vivienda votó a favor de seguir integrando el grupo de Gobierno.