Gabriel Molina, presidente de Sindicato Único de Telecomunicaciones (Sutel), dijo este miércoles que la decisión del presidente Luis Lacalle Pou de dar marcha atrás con la presupuestación de 857 trabajadores de Antel fue tomada de forma “muy apresurada” y “muy al grito de la hinchada”.

Entrevistado en Informativo Sarandí, Molina aseguró que la situación tomó “una magnitud que no le corresponde” dado que “no hay ningún ingreso nuevo” y que los trabajadores “ya habían pasado todos los procesos de regulación” de la empresa estatal. 

“No son ñoquis, son trabajadores de Antel”, insistió Molina, que aseguró que la presupuestación no implicaba ningún gasto extra para la empresa estatal y que ahora los trabajadores seguirán bajo el régimen en que estaban.

El sindicalista aseguró que el gobierno “tendría que haber conversado” con el gremio ya que el convenio colectivo establece que a los tres años de labores en la empresa, un trabajador debe pasar a ser presupuestado, como era el caso de los 857 trabajadores.

Sutel está analizando las medidas que tomarán a nivel jurídico, contó Molina.