Hace un año y medio Alejandro Ferreiro dejó de hacer "Planetario", que durante años marcó la diferencia en la programación radial nocturna. En febrero de 2006 se despidió de la audiencia, publicó una novela, se fue de viaje y escribió otro libro en el camino. El 6 de agosto, comienza una nueva etapa en TV Ciudad con el programa "Dos veces uno" y, antes de fin de año, publicará la obra que escribió en Europa. Aunque no quiere adelantar sobre el contenido del programa, Ferreiro dice que tiene como fin "darle un espacio al moribundo arte de la conversación".

 

¿Qué tiene que ver este proyecto con Planetario?


No tiene nada que ver con Planetario por razones obvias, porque es otro lenguaje, que es la televisión, pero sí tiene que ver conmigo. Lo que podría compararse con Planetario es la entrevista, que puede tener un tono que de desprenda de mi forma de ser y de conversar, del tipo de conversación que podías escuchar si eras oyente de Planetario. Tampoco lo sé, porque yo nunca hice televisión de esa manera, y hasta que no se haga no sé que va a salir, la experiencia que voy a tener va a ser el primer vivo. El programa, que se llama "Dos veces uno", será en vivo, esa era una condición para que saliera al aire. Lo que suceda va a suceder ahí. Lo que sí va a ser similar a Planetario es un encare en el trabajo, desde qué lugar nos vinculamos con esto, desde qué lugar trabajamos el periodismo. Y vamos a "dar la cara", que es lo menos interesante de todo esto. Era un paso que no era que tuviese que dar, pero en algún momento quería darlo para hacer "este" programa, y no otro, y me preocupa eso, el perder la reserva que te da un programa de radio. Me gusta mucho eso de hacer algo sin ser visto, y ahora lo estamos matando.

 

¿Te molesta perder ese anonimato?


Aquí en mi edificio la mayoría de la gente no sabe que yo hacía un programa de radio. Me pasó, cuando vivía en otro edificio, una vez que me enfermé y no pude ir al programa, escuché a Julieta (productora del programa) hablando desde la casa de al lado, por la ventana. Y era un vecino que no me saludaba, con el que no tenía mucha comunicación, era poco "saludador", y el tipo escuchaba todos los días. Después, por una circunstancia fortuita, él vio un sobre que llegaba a mi casa con mi nombre, y no lo podía creer, ninguno de los dos.
Claro que el dar la cara, en un punto, es matar aquel anonimato, y cuando vuelva a hacer radio, que voy a volver a hacer en algún momento, ya no tendré ese hándicap. O quizá sí, no lo sé

Cuando hacías radio decías no ser escucha. Ahora, que vas a estar en televisión, ¿mirás tele?


No. No miro tele. Confieso que en la última semana traté de ver un poco, pero no tengo cable, por lo que he mirado canales abiertos, pero muy poquito. Vi los programas de alguna gente que aprecio, a ver cómo le iba en proyectos nuevos que salieron, pero poco, porque trabajo bastante de noche. No sé lo que hay en los canales, no sé de ciclos ni nada. De chico sí miraba mucha televisión, hasta los 17 años, y de repente dejé de ver. Coincidió con que empecé a trabajar en radio. Siempre escucho el medio en el que trabajo, sobre todo para seguir a los amigos, pero de hecho desde que me fui de la radio no volví a escuchar hasta ahora. Estuve un año sin hacerlo. Cuando escucho radio hoy, escucho No Toquen Nada, que es un programa que me gusta. Es lo único, pero no lo hago todos los días, me olvido. Si me acuerdo, me despierto, prendo la radio, me voy a duchar, escucho a Joel, a Darwin Desbocatti, pero si está prendida es porque hago cosas manuales que me permiten escuchar radio. Si no, apago todo y me concentro en mis entretenimientos personales.


¿Volvés a la radio?


Hace un año y medio que no estoy en radio, y, desde el día que dejé Planetario, no tuve ningún día la añoranza de estar en ese medio. Porque recuperé las noches para mí, eso tuvo un impacto muy grande en mi vida personal, poder cenar con amigos, verlos al salir de trabajar, no extrañé para nada, la pasé muy bien. Después me fui a Europa 3 meses, y cuando volví lo hice sin ganas de hablar. Si bien me encantó hasta el último momento hacer Planetario, no tengo la mínima intención de hacerlo de nuevo. Ese programa cumplió un ciclo, y mi cabeza, ya sea por necesidad, naturaleza por defensa o por lo que sea, me llevó por otros caminos y no tengo añoranza de ella. Pero sí quiero hacer radio alguna vez más, estoy casi convencido. ¿Qué haré? No sé. Planetario no, aunque hiciera un programa de noche, que tendría algunas cosas parecidas, porque soy yo, pero no estoy pensando en eso. Pero si sigo viviendo del periodismo, o si una parte de mis ingresos emocionales y económicos siguen en el periodismo, seguramente vuelva a la radio. Es lo que más me gusta de todo lo que experimenté. Y la tele ya te diré, dentro de un tiempo.
Seré el primer sorprendido con mi programa, porque es en vivo "de verdad". Habrá cosas funcionarán o no ese día, sin posibilidad y sin ganas de probarlas antes. Hay un altísimo porcentaje de posibilidades de que algo funcione mal. Lo que suceda en ese lugar no podrá ser modificado ni editado. Pero es un show, una actuación, lo vivo de esa manera, y me gusta que sea de esa forma.
Yo quiero divertirme, pasarla bien, y transmitir eso, en torno a temas que pienso que hay que prestarles atención. Mi preocupación principal como periodista es la comunicación, lo que no quiere decir que sea un comunicador, palabra que detesto. A mí me interesa el otro, me interesa la gente.


¿Qué experiencia tenés en televisión?

Tuve algunas apariciones como entrevistado, y estuve como columnista de un programa hace unos años, pero eso no es haber hecho televisión. Soy un absolutamente ignorante de lo que es el medio por dentro, y casi por fuera, pero no me preocupa porque mi proyecto, desde la base, trata de resolver esa ignorancia mía desde el lenguaje televisivo. Se parece más al teatro, pero tiene que ser televisión, no la desprecio, no me la voy de que "es una porquería"; me parece un medio increíble, porque yo tengo ese vínculo como espectador, pero es un medio que te ata, y yo necesito estar en movimiento. Soy de esas personas que van a un bar y está la tele prendida y se queda como tarado. Soy el clásico candidato a ser un teleadicto, aunque lucho contra eso.


¿Qué cambiaste entre el fin de Planetario y este nuevo proyecto?


En el viaje aprendí algo que sabía de chico y que había olvidado, y es que la medida de todas las cosas está en la naturaleza. Si estás cerca de la naturaleza, encontrás los parámetros para moverte. La naturaleza te pone en tu lugar. Por ahí estamos acostumbrados a la Rambla, a determinados lugares que uno ve con cotidianeidad y que ya no funcionan como regla para medirte, pero una montaña, por ejemplo, te acomoda en seguida. Te hace tomar conciencia de la dimensión humana, de sus cosas buenas, de sus cosas malas, y sobre todo de vos mismo. Y aprendí que la patria son los amigos.

"Dos veces uno" comienza el lunes 6 de agosto en TV Ciudad, con frecuencia semanal, y será repetido en Televisión Nacional los martes.

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