El Pentágono informó este jueves que desplegará inmediatamente unos 3.000 soldados en Afganistán para evacuar a funcionarios de la embajada de Estados Unidos, mientras crece el avance de la insurgencia talibán.

"El primer movimiento consistirá en tres batallones de infantería que actualmente están bajo responsabilidad del Mando Central del área. Ellos se dirigirán al aeropuerto internacional Hamid Karzai entre las próximas 24 y 48 horas", dijo el portavoz del departamento de Estado John Kirby.
Por su parte, el Reino Unido desplegará temporalmente unos 600 militares en Afganistán para ayudar a los ciudadanos británicos a abandonar el país, por la misma razón.

"Autoricé el despliegue de personal militar adicional para apoyar la presencia diplomática en Kabul, ayudar a los ciudadanos británicos a salir del país y apoyar la reubicación de los antiguos miembros del personal afgano que pusieron en riesgo su vida trabajando a nuestro lado", declaró el ministro de Defensa británico, Ben Wallace, citado en un comunicado.

Despliegue

Ese despliegue de soldados adicionales de EEUU, cuyo número es casi el mismo que los 3.500 que estaban en Afganistán cuando comenzó la retirada militar el pasado mayo, llega en un momento en el que Estados Unidos ya había completado al 95 % ese proceso para sacar a sus tropas del país.

El portavoz del Departamento de Estado, Ned Price, fue el primero en anunciar el proceso para sacar al personal diplomático de Afganistán, debido al declive de la situación de seguridad. En una rueda de prensa, Price negó que este movimiento sea una evacuación completa e insistió en que el trabajo de la embajada continuará, incluida la tramitación de los visados especiales para los afganos que han trabajado con las tropas estadounidenses.

Recalcó en cualquier caso que la "prioridad" del Gobierno estadounidense es la seguridad de su personal y de ahí que haga este movimiento, para el que contará con el apoyo de tropas estadounidenses adicionales que el Departamento de Defensa enviará al aeropuerto de Karzai, en la capital.

Price insistió en todo momento en que el objetivo de las tropas que se van a enviar adicionalmente no será otro que el de ayudar en dicha evacuación, preservar la seguridad del personal estadounidense y ayudar en su salida. "Única y exclusivamente" eso, aseguró.

Recordó que en el acuerdo alcanzado entre Estados Unidos y los talibanes en 2020, estos se comprometieron a no atacar tropas estadounidenses.

Por eso advirtió que si incumplen dicho acuerdo y colocan entre sus objetivos a las tropas estadounidenses, incluidas las que van a acudir a ayudar al cuerpo diplomático, "habrá respuesta, y será una respuesta sin ambigüedad alguna".

El portavoz del Departamento de Estado opinó que la decisión de retirar a la mayor parte del cuerpo diplomático no supone una huida por parte de EE.UU.

"Esto no es un abandono, no es una evacuación, no es una retirada, es una reducción de nuestro personal civil", recalcó Price.

Admitió en cualquier caso que el Gobierno que preside Joe Biden ha tomado esta decisión ante el deterioro de la seguridad en el país.

La decisión dada a conocer este jueves, según Price, formaba parte de los planes de contingencia que EE.UU. tenía previstos en caso de que se produjera una situación como la actual.

Por otro lado, el portavoz del Departamento de Estado insistió en enviar el mismo mensaje a los talibanes que "con una sola voz" le lanza la comunidad internacional, el de que no reconocerá "ninguna entidad" que pretenda conformarse "desde la violencia". Además, insistió en pedir una solución dialogada entre las partes en Afganistán.

En base a AFP y EFE