Según informó el portavoz del Pentágono, John Kirby, a través de un comunicado, esta acción se ha autorizado en respuesta a "los recientes ataques contra el personal estadounidense y de la coalición en Irak", así como por las amenazas contra este mismo personal.
En concreto, el ataque destruyó "múltiples instalaciones situadas en un punto de control fronterizo utilizado por varios grupos milicianos respaldados por Irán", incluidos Kataeb Hezbolá y Kait'ib Sayyid al-Shuhada (KSS), también conocida como Batallón Sayyid de los Mártires.
Se cree que estas instalaciones serían utilizadas como parte de una operación de contrabando de armas, según recoge CNN.
Kirby también añadió que esta respuesta militar "proporcionada" se ha lanzado junto con medidas diplomáticas, incluida la consulta con los socios de la Coalición. Esta acción también tuvo como objetivo "desescalar la situación general tanto en el este de Siria como en el de Irak", precisó el portavoz.
"La operación envía un mensaje inequívoco", subrayó el Pentágono, Biden actuará "para proteger al personal estadounidense y de la Coalición".
Este supone el primer ataque militar en el extranjero autorizado por Biden, en respuesta a una serie de ataques con cohetes contra instalaciones utilizadas por estadounidenses en Irak, uno de ellos dejó una víctima mortal y seis heridos.
La relación entre Estados Unidos e Irán atraviesa una etapa crítica, ante una posible negociación de vuelta al pacto nuclear, del que Estados Unidos se marchó en 2018 bajo la Administración Trump, y en el contexto del creciente miedo de las naciones occidentales de las capacidades de Irán para producir armas nucleares.
Con información de Europa Press