Mark Longo, dueño de la cuenta viral Peanut the Squirrel y de la reserva animales rescatados homónima, anunció este viernes del fallecimiento de dos de sus mascotas, la ardilla y su mapache llamado Fred, quienes fueron “arrebatados” por el gobierno local de Nueva York y eutanasiados para ser examinados por rabia. 

P’Nuts era una ardilla gris que, según informó New York Post, fue rescatada en 2017 por Longo, quien vio a su madre ser atropellada por un auto. Desde ese entonces, él y su pareja, Daniela Bittner, grabaron su día a día con la mascota rescatada en redes sociales, donde llegó a juntar más de un millón de seguidores y me gusta en las plataformas de Meta (Facebook e Instagram) y Tiktok.

El miércoles de esta semana, tras recibir varias denuncias anónimas sobre la tenencia de estos animales, el Departamento de Conservación Medioambiental de Nueva York confiscó a P’Nuts y Fred. Dos días después, la institución publicó un comunicado donde alegó que la ardilla mordió a uno de los funcionarios que la capturó y, en consecuencia, realizaron una eutanasia a ambos animales con el fin de confirmar si había presencia del virus de rabia. 

“Gracias internet, realmente ganaron”, escribió Longo en su cuenta de Instagram y remarcó que le “arrebataron uno de los animales más asombrosos a causa de su egoísmo”. “A quienes llamaron a la DEC (departamento de conservación medioambiental en inglés), hay un lugar especial en el infierno para ustedes”, afirmó en el comunicado.

Longo y Bittner son dueños de P’Nuts Freedom Farm Animal Sanctuary, un centro de rescate de animales sin fines de lucro cuyo nombre hace referencia a la difunta mascota que inspiró la movida de estos influencers.

La pareja publicó un video pidiendo apoyo monetario a sus seguidores ante una “batalla legal” que iniciaron contra el estado de Nueva York y comentaron a TMZ que la causa es por “abusar de su poder y derrochar dinero de impuestos para matar a P’Nuts”.

La trágica situación genero tracción en la dimensión política. Más allá del juicio que los dueños de estos animales buscan realizar contra el estado, el ingeniero y dueño de la red social X, Elon Musk, opinó que “no está para nada bien entrar a una casa a matar la mascota de alguien en la tierra de la libertad” y que el gobierno “es una máquina de matar”.

Musk, quien ha ganado notoriedad por vincularse discursiva y financieramente en la campaña electoral del expresidente Donald Trump, también remarcó en su plataforma que la ardilla “fue más investigada que cualquiera de los clientes”, y preguntó si “realmente podría ponerse más turbia” la situación.