Un residente de San Francisco se volvió viral en las redes sociales debido a un episodio lamentable. En un video —que ya superó los 19 millones de reproducciones en Twitter— aparece rociando agua con una manguera a una mujer en la calle.
Collier Gwin, el propietario de una galería de arte, fue grabado mientras mojaba a la mujer en la puerta de su establecimiento y generó numerosas reacciones de rechazo.
“Este hombre terrible está rociando con una manguera a una mujer sin hogar. Se la escucha gritar, ‘¡Ayúdame!’. ¿Alguien lo reconoce…? Esto es inhumano e inexcusable”, escribió uno de los tantos internautas que comentaron el video.
Tras la viralización del video, la cadena noticiosa NBC contactó a Gwin, quien dijo haber llamado a la policía y a los servicios sociales en numerosas ocasiones para quejarse de la mujer que, en sus palabras, puede ser perturbadora. “Todo el barrio es parte de esta situación”, aseguró.
“La policía es parte de esta situación. La ciudad y los servicios sociales son parte de la situación. Hubo repetidos intentos de tratar de ayudar a esta mujer, que es psicótica”, refirió.
“No hay absolutamente nada que se pueda hacer. La van a llevar a un albergue y la van a tirar afuera en dos días” o bien “la llevarán al hospital, y la darán de alta en el día”.
En un posterior reportaje con la televisora KGO-TV, aseguró que tanto él como otras personas del área ya intentaron ayudar a la mujer, quien en las últimas semanas comenzó a “bloquear” entradas y aceras. Antes de la escena en cuestión, Collier dijo que le ofreció su ayuda.
“Entiendo totalmente lo horrible que es hacer eso, pero también entiendo lo horrible que es dejarla en la calle. Esta mujer está en una situación muy, muy triste. Es muy psicótica”, remarcó.
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— Clown World ™ ?? (@ClownWorld_) January 10, 2023
“Lo siento mucho, mucho, no me voy a defender, no lo haré porque no puedo defender esto”, admitió en el reportaje.
“Dije que necesitaba ayuda psiquiátrica”, explicó, para luego describir la conducta de la mujer. “Se tira del pelo, grita, balbucea, no se entiende nada de lo que dice, arroja comida por todas partes”, contó.
“Allí estaba yo una vez más limpiando su desorden, lavando y tratando de limpiar sus cosas, y me asusté. Cuando ella salió con sus berridos agresivos y esas cosas, simplemente me asusté, saqué la manguera y la rocié”, contó.
La policía de San Francisco dijo que ambas partes se negaron a emprender más acciones policiales y agregaron que el Equipo de Respuesta a Crisis de la Calle San Francisco “respondió en la escena y brindó múltiples opciones de servicio” para la mujer.