El presidente electo de Estados Unidos, Donald Trump, ya nombró a algunas personas de confianza para integrar su futuro gabinete y aspira a que puedan asumir sus puestos sin tener que someterse al proceso de confirmación en el Senado.

El republicano de 78 años anunció el domingo que confiará el candente asunto del control fronterizo a Tom Homan, un defensor de la política de mano dura que ya estuvo al frente del Servicio de Inmigración y Aduanas (ICE).

Homan regresará con la misión de implementar la promesa de Trump de llevar a cabo la mayor operación de expulsión de inmigrantes irregulares en la historia de Estados Unidos.

Este lunes, Trump nominó como jefe de la Agencia de Protección Ambiental (EPA) a Lee Zeldin, de 44 años, un excongresista republicano del estado de Nueva York.

Al anunciarlo, el presidente electo dijo que es un luchador de las políticas de “Estados Unidos primero” y que estará a cargo de tomar “decisiones desregulatorias rápidas” para revertir protecciones promulgadas por la administración de Joe Biden.

En la misma línea, el magnate anunció a la congresista republicana Elise Stefanik, de 40 años, como embajadora de Estados Unidos ante Naciones Unidas.

“Elise es una combatiente increíblemente fuerte, dura e inteligente”, afirmó Trump, que asumirá la presidencia de Estados Unidos en enero.

Elegida para el Congreso en 2014 con solo 30 años, Stefanik inicialmente se posicionó como una voz moderada, pero gradualmente se afirmó como pro Trump.

Cobró protagonismo a nivel nacional por su impetuosa defensa del expresidente en su primer proceso de impeachment (juicio político) en 2019, y luego se negó a certificar las elecciones que el demócrata Biden venció en 2020.

En diciembre de 2023, volvió a aparecer en una secuencia que se volvió viral en las redes sociales, en la que aparece interrogando con dureza a la entonces rectora de Harvard, Claudine Gay, sobre las protestas propalestinas en la universidad. Gay renunció poco después en medio de fuertes presiones.

Fuerte apoyo a Israel

“El trabajo por delante es inmenso, pues vemos que el antisemitismo se dispara, sumado a cuatro años de liderazgo estadounidense catastróficamente débil que debilitó significativamente nuestra seguridad nacional y disminuyó nuestra posición ante aliados y adversarios”, dijo Stefanik, ferviente defensora de Israel, en un comunicado el lunes.

Israel saludó el nombramiento y su embajador ante la ONU, Danny Danon, felicitó a Stefanik. “En un momento en que el odio y las mentiras llenan los pasillos de la ONU, su inquebrantable claridad moral es más necesaria que nunca”, escribió.

En la política estadounidense, el puesto de embajador ante la ONU suele servir como trampolín hacia cargos superiores, como ocurrió con Madeleine Albright, que fue secretaria de Estado durante el gobierno de Bill Clinton; Susan Rice, nombrada asesora de seguridad nacional por Barack Obama; o George Bush padre, que llegó a ser presidente.

Donald Trump había designado para este cargo a Nikki Haley en 2017, pero ahora descartó volver a llamar a la republicana, que lo desafió en las primarias a principios de este año.

Evitar el Senado

Según la Constitución estadounidense, el Senado debe aprobar los nombramientos hechos por el presidente.

Pero Trump ya ha dicho que buscará saltearse este paso, pese a que los republicanos le arrebataron a los demócratas el control de la Cámara Alta.

Para ello, pretende utilizar una cláusula constitucional que permite al presidente realizar nombramientos temporales cuando el Senado no está sesionando.

“Cualquier senador republicano en busca de la codiciada posición de LIDERAZGO en el Senado de Estados Unidos debe estar de acuerdo con Nombramientos en Receso”, afirmó Trump el domingo.

El republicano, 45.º y próximamente 47.º presidente de Estados Unidos, será recibido por Biden el miércoles en la Casa Blanca.

El mandatario electo hizo su primer nombramiento importante el jueves, cuando anunció a Susie Wiles como jefa de Gabinete, la primera mujer en ocupar este cargo estratégico.

Wiles fue la artífice de la exitosa campaña electoral con la que Trump ganó los siete estados clave y conquistó 312 electores contra 226 de la vicepresidenta demócrata Kamala Harris, con el voto popular a su favor.

Los republicanos también son favoritos para ganar la Cámara de Representantes por un estrecho margen, aunque en algunas regiones como California el conteo aún no ha concluido.

AFP