Este lunes, tras tres semanas de licencia especial, la construcción retomó las actividades y 45.000 trabajadores en todo el país reiniciaron sus trabajos en las distintas obras. A esta situación se llegó luego de que el Gobierno, la Cámara de la Construcción y el Sunca acordaran un protocolo de trabajo para mitigar los posibles contagios de Covid-19.
Daniel Diverio, presidente del sindicato, expresó que la postura de los trabajadores era no retomar la actividad, ya que se entendía que las condiciones actuales son "peores" que las que llevaron a la licencia especial hace tres semanas. "Antes no teníamos tantos contagiados ni tampoco muertos", dijo en declaraciones a Más temprano que tarde, de El Espectador.
Sin embargo, por iniciativa del Ejecutivo y las Cámaras Empresariales y para "reactivar la economía y no apagar los motores" se decidió convocar al trabajo este lunes 13, un mes después de que el Gobierno decretara la emergencia sanitaria.
El protocolo firmado establece algunos lineamientos, como la obligatoriedad del uso de tapabocas, de alcohol en gel o jabón líquido, el acondicionamiento de los lugares de trabajo, como el comedor y los baños, y medidas implementadas en el transporte.
Si en algunas de las obras no se cumple el protocolo, Diverio señaló que el trabajador tiene derecho de denunciar las situación en la obra y parar las tareas. "Hoy empezó esto y en algunas obras tuvimos dificultades", advirtió.
"Tuvimos empresas grandes que ni siquiera tenían tapabocas. No se puede entender que empecemos a hacer el trabajo de acondicionamiento sin lo básico, primero, que es el tapaboca", declaró el dirigente, y dijo que "muchas veces" las empresas "intentan interpretar diferente".
"No se trata de que no queremos trabajar, se trata de ser responsables", comentó y ejemplificó con la obra de la cementera en Treinta y Tres, donde trabajan 700 obreros.
"La empresa decidió que, como tiene complicaciones para cumplir con el protocolo, no se reinicían las tareas y que los trabajadores vuelvan al seguro de paro y otros se queden sin nada. Eso habla de una gran irresponsabilidad. Si no están las condiciones, y me convocarás a trabajar, voy, y resulta que cuando estoy me decís que no me podés dar trabajo porque no podés cumplir con el protocolo que firmaste y que te comprometiste. Esas cosas realmente no ayudan a desarrollar las cosas con normalidad", lamentó.
El dirigente apuntó que "muchas empresas piensan que vale todo" y que, como se está atravesando una pandemia, se pueden tomar medidas "si total no pasa nada".
"Muchas están recortando personal, mandando gente al seguro de paro. Vamos a pedir una comisión en el Ministerio de Trabajo para pedirles que, si la empresa no tiene argumentos para mandar al seguro de paro, no se le acepte es medida"; comentó.
Diverio dijo que "había alternativas" para evitar que se retome la actividad, y que fueron planteadas, pero fueron rechazadas "porque había que reactivar la economía". "Al Estado le salió cinco veces más barato nuestra licencia que si nos hubieran enviado al seguro de paro", enfatizó.