El director de Movilidad de la Intendencia de Montevideo, Pablo Inthamoussu, explicó las razones por las cuales la comuna decidió aumentar el precio del boleto a partir del próximo jueves, medida que fue criticada por los ediles de la oposición en Montevideo. En primer lugar, el jerarca apuntó que no es una medida que se toma por una única razón, sino que es por “varias razones”.

“En este caso particular, lo que lleva a tomar la decisión básicamente son dos elementos. Uno de ellos es que el sistema de transporte durante tres años perdió 220 millones de boletos, que impactó fuertemente, siendo la peor crisis en la historia del transporte. Hemos tenido que sostener el sistema porque tuvimos que garantizar el servicio y durante estos tres años han habido asistencias externas: del gobierno nacional, de la intendencia, los trabajadores cedieron parte de su salario y las empresas cedieron parte de sus ingresos”, aseguró.

Por otro lado, el otro componente que señaló Inthamoussu tiene que ver con la economía en general y la inflación en particular, donde los precios van aumentando, y, por tanto, los precios deben ir actualizándose.

“Estamos intentando fijar la tarifa para todo un año, la incertidumbre es muy grande, hay mecanismos de subsidio que son muy importantes porque permite esa estabilidad, estamos a la espera de algunos anuncios que se han hecho con respecto a ese subsidio”, expresó.

Consultado sobre si el precio del boleto pueda generar un descenso de la demanda del transporte público, el director de Movilidad respondió que esa variante “siempre está sobre la mesa” cuando se toman este tipo de decisiones, aunque reconoció que tienen que ser “responsables”, teniendo en cuenta que el precio es una “variable importante” para continuar recuperando la demanda. Sin embargo, afirmó que no pueden sostener con “recursos que no existen” los costos del sistema que están evolucionando al alza. “Tenemos que ir tomando decisiones que vayan equilibrando, teniendo en cuenta que la tarifa es un elemento fundamental”, señaló.

“El sistema perdió 220 millones de boletos. En una cuenta bastante sencilla, lo que se evaporó de la caja del sistema de transporte fueron unos 220 millones de dólares”, detalló. 

Finalmente, con respecto al tarifado, Inthamoussu explicó que el precio de la hora no se modificaba hace tres años y que en este caso, lo que se ve reflejado es el aumento de un año, es decir, que el porcentaje de aumento es el equivalente al IPC de un año. Además, informó que, por ahora, no está previsto ampliar el estacionamiento tarifado. “Lo seguimos estudiando, como siempre”, concluyó.